Vicente y Moreno salvan al Poli Ejido

Como los viejo rockeros nunca mueren, tuvo que ser Moreno el que le diera la salvación al Poli Ejido. Bueno, el veterano jugador roquetero y la garra de un equipo celeste que se jugó el todo por el todo tras el primer gol local y sacó fuerzas de flaqueza para dedicarle un triunfo a su afición, que celebró como se merece una permanencia muy meritoria después de los graves problemas económicos que está sufriendo el Poli.

Y eso que las cosas se pusieron francamente difíciles cuando el San Roque, que se estaban jugando la promoción de ascenso a Segunda, se adelantaba en el marcador tras el descanso. Una falta botada al interior del área celeste cae en las botas de Jaume, que lanza un derechazo ajustado al palo izquierdo de Ubierna. El único acercamiento de los leperos acabó en el 0-1. Tocaba sacar el corazón y el honor para remontar y sellar la victoria.

Pero la alegría le duró tan sólo cuatro minutos al equipo visitante. Fue lo que tardó Katxorro en botar un saque de esquina, que remató con rabia Vicente para batir la meta de Pau. La grada explotó de alegría porque veía a su equipo capaz de remontar y, de paso, amarrar la permanencia. Era el minuto 50 y quedaba más de media hora para obrar el milagro. Y éste iba a llegar en la recta final del choque.

Arkaitz se interna por su banda y llega hasta el fondo. El celeste pone el balón atrás para que alguien rematase y ahí aparece Moreno para conseguir el 2-1 y devolver la alegría a Santo Domingo en una campaña de penurias. Todo el equipo se fundió en una piña y celebró el tanto como se merece. Un tanto que vale una salvación, un tanto que hizo feliz a todo El Ejido que seguirá, si la economía lo permite, en Segunda B.