Opinión
Carlos Navarro Antolín
El Rey brilla al defender lo obvio
UD ALMERÍA | Estadística
Almería/El reto en el que se ha embarcado Gaizka Garitano al tomar las riendas de la UD Almería en la actual coyuntura es mayúsculo. Al menos eso es lo que dicta la estadística, que suele arrojar bastantes certezas. Haciendo un análisis de la Primera División española desde temporada 1995-1996, cuando se instauró el sistema de 3 puntos por victoria, los precedentes no son bastante halagüeños para los intereses rojiblancos, si bien hay una puerta abierta a la esperanza a la que pueden aferrarse los seguidores indálicos.
En ese periodo de tiempo se han disputado 28 temporadas completas (ni siquiera la pandemia de coronavirus desatada en 2020 logró cancelarla) y en trece de ellas al menos un equipo había alcanzado la novena jornada sin ganar un solo partido, en circunstancias similares a las que vive la UDA en la actualidad. La lectura negativa es que nueve de esos trece conjuntos acabaron con sus huesos en Segunda División al término de las respectivas campañas.
El primero en entrar en barrena fue el Sporting de Gijón durante la temporada 1997-1998, protagonizando el cuadro gijonés un tétrico arranque al sumar solo un punto de veintisiete posibles, convirtiendo apenas seis dianas y encajando veinticuatro, las mismas casualmente que acumula en contra el Almería hoy por hoy. Los del Molinón acabaron descendiendo como colistas con una bolsa de 13 pírricos puntos. Hubo que esperar muchos años para que otro conjunto siguiera sus pasos. Fue la Real Sociedad en la 2006-2007. Los txurri urdines llevaban un balance de 0/2/7 [victorias/empates/derrotas] en las nueve primeras jornadas y bajaron como penúltimos con 35 unidades. Algo parecido le sucedió al Levante al curso siguiente (2007-2008). Iniciaron con una serie 0/1/8 y descendieron como farolillos rojos con 26 puntos. El Racing de Santander (2011-2012) también cayó en la trampa de un mal inicio. Firmó cuatro igualadas en los nueve partidos iniciales y solo fue capaz de sumar 27 puntos en el cómputo global, bajando también como colista.
Más recientemente han vivido una pesadilla similar equipos como Granada, Málaga, Leganés, Huesca o Elche. Los nazaríes cayeron en la 2016-2017 tras sumar los mismos empates que el Almería (3) en 9 duelos para descender como últimos y con 20 puntos en su casillero. Con idéntica cifra de puntos perdieron la categoría del mismo modo sus vecinos malacitanos solo un año después (2017-2018), si bien en su caso arrancaron incluso peor, al sumar un solo punto en las nueve primeras jornadas. El Leganés hizo algo parecido en la 2019-2020. Lastrado de inicio por lograr 2 puntos de 27 en juego descendía con 36 unidades en el 18º puesto. El último en unirse a esta selección de horrores fue el Huesca(2020-2021) y el Elche, caído en combate el curso pasado. Los azulgrana firmaron un 0/6/3 de salida, duplicando en puntos a la UDA por esa media docena de igualadas, lo cual no impidió que descendieran con 34 unidades. Más fresco en el tiempo está el descenso ilicitano, solo hay que mirar por el retrovisor para recordarlo. Los del Martínez Valero llevaban un balance calcado al de los indálicos hoy, comenzando con 0/3/6. Llegaron prácticamente muertos al mes de diciembre, descendiendo con 25 puntos y colistas.
Pero la historia reciente también arroja ejemplos de casos milagrosos a los que aferrarse y uno de ellos estuvo protagonizado por el propio Almería, entrenado entonces por el almeriense Francisco Rodríguez Vílches, hoy en las filas del Rayo Vallecano. En ese cupo de machadas están también Osasuna, Zaragoza y Getafe, el último en lograrlo. El primero fue el cuadro pamplonica en la ya lejana 2008-2009. Empezaron con cuatro empates en nueve partidos, pero lograron remontar el vuelo para terminar con 43 puntos en el puesto 15º. En orden cronológico le siguieron los maños en la 2010-2011. En su caso también arrancaron el curso con 4 puntos sobre 27 posibles para finalizar con 45 en el 13º puesto.
Y entonces irrumpió el Almería de Francisco para demostrar que los milagros a veces existen. Fue en la temporada 2013-2014, primera tras el segundo ascenso a la máxima categoría. Alfonso García no había renovado a Javi Gracia, ingeniero del logro, y le dio el equipo a un técnico de la casa que además se estrenaba en Primera. El inicio fue complicado y tras 9 jornadas solo se habían sumado 3 puntos de otros tantos empates, justo como en la actualidad. Fueron 11 goles a favor por 20 en contra por los 11/24 de hoy y, pese a que todo se veía oscuro, aquel equipo logró recomponerse. No ganó el primer partido hasta la undécima fecha en el complicado escenario de Mestalla, pero a partir de ahí fue creciendo poco a poco hasta acabar 17º con 40 puntos eludiendo la quema. El mejor espejo en el que mirarse, sin duda.
El Getafe, en cualquier caso, es el ejemplo más reciente (2021-2022) de no bajar los brazos pese a arrancar con 2 puntos sobre 27 al cosechar solo dos empates en nueve partidos. Los azulones no se rindieron y firmaron la salvación con 39 puntos en el puesto 15º. Si cuatro equipos lo lograron con anterioridad y uno de ellos fue la propia UDA la historia dice que lo probable también es posible. Ahora falta aplicar sin denuedo el lema de la entidad, 'Almería nunca se rinde'.
También te puede interesar
Lo último
No hay comentarios