La universidad (americana) les espera

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La roquetera Pendande, que ya ha militado en el Ribet Academy, y la almeriense Satorre, van a coincidir en las canchas 'yanquis'

Aprovecharán para estudiar sendas carreras

La universidad (americana) les espera
Pablo Laynez

08 de julio 2018 - 02:31

1.902 millas. O lo que es lo mismo: diecisiete horas de coche o cuatro de avión. Ésa es la distancia que separa la Universidad de Salt Lake City, donde va a estudiar y jugar Lola Pendande, de la del Paso, en Texas, donde va a hacer lo propio Conchi Satorre. Las dos jugadoras almerienses van a coincidir en cuestión de semanas en la mejor liga de baloncesto del mundo, además de aprovechar para perfeccionar el inglés y sacarse sus carreras universitarias: Periodismo en el caso de la roquetera y Económicas la capitalina.

Lola ya se fue la temporada pasada, fue la avanzadilla de la Federación Almeriense. La oportunidad le llegó después de realizar un magnífico Mundial sub'17 en Zaragoza en 2016. Ribet Academy se interesó en ello y, ni corta ni perezosa, hizo las maletas y cruzó el charco. Conchi también tuvo la oportunidad de hacerlo, pero prefirió aguantar un año más en el CB Almería: "Después de conseguir ascender, quería jugar un año en la categoría nueva. Tenía muchas ganas de dar ese salto y no hay mejor lugar que en mi ciudad y en mi equipo de siempre", aunque una vez acabada la temporada y lograda la salvación, nuevamente un equipo universitario le lanzó el anzuelo: "Una agencia se puso en contacto conmigo para explicarme la situación y acepté".

Las dos jugadoras estuvieron juntas la pasada semana en el Campus de la FAB en Roquetas y Lola le pudo decir que, aunque cuesta adaptarse, todo es fuerza de voluntad. "Me resultó un poco duro al principio, pero luego me fui sintiendo muy cómoda. Es un juego que va mucho conmigo, mi físico resalta mucho y es en lo que más se fijan los estadounidenses", explica la roquetera, que está estrujando al máximo esta experiencia: " El idioma lo llevo muy bien, ya lo hablo casi perfecto. Los entrenamientos son duros pero con esfuerzo y ganas se saca todo".

A Conchi no le asusta el mayor ritmo y nivel que presupone que va a encontrar en las canchas americana, confía en su potencial. "Es un baloncesto diferente al de aquí, mucho físico, gente más grande, pero creo que para mi forma de jugar me puede favorecer bastante por mi estilo de juego", mientras que sabe que en el día a día va a estar bien cuidada: " Viviré en la misma Universidad, dentro del campus tengo todo: lugar donde entrenar, donde estudiar, gimnasio, ocio... Allí lo adaptan todo para los deportistas y ésa es la ventaja fundamental de EEUU".

Mientras llega el momento de volver a hacer las maletas, coger el avión y cruzar el Atlántico, Lola y Conchi terminan de disfrutar de su tierra, de sus amigos y de su familia, "lo que más se echa de menos". Pero cuando el balón bota o llega la época de exámenes, todo se olvida.

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