El resurgir del ladrillo en la Costa del Sol
Construcción
Estepona, el municipio que más ha crecido como consecuencia de la anulación del PGOU de 2010 de Marbella
Actualmente se están construyendo unas 3.500 viviendas en la localidad
Estepona/La construcción de viviendas de obra nueva ha resurgido con fuerza en los últimos años en la Costa del Sol desde que promotoras y fondos inmobiliarios nacionales e internacionales pusieran el foco en el litoral malagueño, que experimenta un nuevo despertar del ladrillo, aunque no todos se atreven a hablar de un nuevo boom de la construcción. Y es que aunque las cifras son alentadoras, sobre todo comparadas con las de los pasados ejercicios, los datos de desarrollo de nuevas promociones son aún bajos con respecto a los años anteriores a la crisis. Desde la Asociación de Constructores y Promotores de Málaga (ACP) se muestras cautos pero reconocen que la tendencia es a seguir creciendo, aunque no de la misma manera ni al mismo ritmo a lo largo de toda la provincia.
Destaca principalmente la construcción de promociones de obra nueva en Málaga Capital, especialmente en la zona de Teatinos, y en la Costa Occidental en municipios como Mijas, Estepona y Benahavís, mientras que en el interior la inversión es prácticamente nula. En cifras, esto se ha traducido en Málaga Capital en hasta 2.206 viviendas visadas en el año 2018, en Estepona en 1.107 (307 más que el ejercicio anterior) y en Mijas en 764 (lo que supone 248 más que en 2017), unas cifras que contrastan con las de hace apenas uno o dos años, lo que pone de manifiesto su crecimiento.
“Durante muchos años la inversión inmobiliaria ha estado prácticamente parada y eso ha hecho que se haya creado una bolsa de compradores”, explica Violeta Aragón, secretaria general de ACP, que destaca que la Costa del Sol “siempre ha sido foco de atención”. “Históricamente la Costa del Sol ha sido muy conocida a nivel internacional por la marca Marbella, más desarrollada turísticamente por sus campos de golf, pero esa marca ya se ha hecho extensible a otros municipios colindantes que se han visto atraídos por esa llamada”, apunta.
Es el caso de Estepona, a la que sin duda ha beneficiado la complicada situación urbanística que atraviesa Marbella en los últimos años como consecuencia de la anulación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de 2010, aunque el Ayuntamiento ya ha puesto en marcha recientemente un plan de choque para agilizar la concesión de licencias urbanísticas. Desde algunas de las principales promotoras que actualmente tienen en marcha diferentes proyectos en la localidad coinciden en la agilidad en la tramitación y la posibilidad de contar con suelo finalista disponible como algunas de las principales ventajas de invertir en Estepona. “Nos decantamos por Estepona motivados por los inconvenientes del urbanismo en Marbella. En Estepona es más fácil la cesión urbanística y el suelo disponible”, explica Silvia Sánchez, directora territorial de Aedas Homes, que actualmente tiene en marcha seis promociones en Estepona, una en Málaga y otra en Fuengirola, lo que suman un total de 542 viviendas comercializadas y próximamente lanzarán nuevos proyectos residenciales en Marbella y Mijas. La promotora dispone de suelo en la provincia para la construcción de más de 2.600 viviendas en los próximos años.
Desde el Ayuntamiento apuntan que en estos momentos se están construyendo 3.500 viviendas en la localidad, especialmente en la zona norte del casco urbano, en la zona este del extrarradio (Cancelada, Atalaya) y en la zona oeste del extrarradio (Santa María y Estepona Golf). Algunas de estas nuevas promociones están comercializando viviendas unifamiliares que oscilan entre los 3 y los 12 millones de euros. El Ayuntamiento considera que los inversores están apostando por desarrollar sus proyectos en Estepona “porque desde la administración local se les garantiza seguridad jurídica y celeridad en los trámites”. A esto hay que añadir que la ciudad resulta cada vez más atractiva para los turistas residenciales por los nuevos equipamientos e infraestructuras que se han ejecutado en los últimos años.
Económicamente, las arcas municipales habrían ingresado hasta cerca de 20 millones a lo largo del pasado ejercicio por concesión de licencias de obras, mientras que en lo que va de año ya alcanza los dos millones de euros. Este crecimiento también se traduce en la creación de empleo en la localidad.
Taylor Wimpey es otra de las grandes promotoras internacionales con mayor inversión en estos momentos en la Costa del Sol, especialmente en el llamado triángulo de oro (Marbella, Estepona y Benahavís) y también en Mijas. Actualmente tiene en marcha ocho nuevas promociones urbanísticas en el litoral que supondrán un total de 388 viviendas, de las cuales está previsto que se entreguen 167 a lo largo del presente año. Desde la compañía destacan que aunque están dirigidas mayoritariamente al público inglés por su ubicación y cercanía con Gibraltar se ha diversificado el producto a lo largo de toda la Costa del Sol, que se extiende hasta los municipios gaditanos de Sotogrande y San Roque.
También Ricardo Arranz, presidente de la Federación de Urbanizadores y Turismo Residencial, coincide al hablar de la reactivación de la construcción en la localidad. “Dentro del triángulo de oro Estepona es la que tiene ahora una mayor fortaleza seguida de Benahavís, donde también se está reactivando el sector inmobiliario. En Marbella, en cambio, está por ver si todo el esfuerzo que están haciendo por normalizar la situación urbanística y agilizar las licencias de obras empieza a funcionar”, señala este empresario, que reclama a las administraciones más celeridad y reducción de los trámites para la concesión de licencias. “No podemos seguir tardando tanto en dar licencias o nos podemos encontrar con otra crisis. Los inversores igual que vienen se van. No existe un destino en Europa como la Costa del Sol y no podemos permitirnos perderlo”, apunta.
Entre otras de las recientes promociones en construcción en Estepona destacan también El Campanario Hills promovida por la promotora Arion Partners y comercializada por Gilmar Real Estate; o la ya terminada Hoyo 19, en Benahavís, junto al hotel Villa Padierna, gestionada por la promotora Lifestyle.
Por otro lado, un informe de mercado 2018-19 elaborado por Engel & Völkers, prevé un crecimiento más moderado tanto en precios como en volumen de transacciones para 2019 en el entorno del siete al diez por ciento, si bien concluye que a partir de este año el aumento de compraventas y la subida de precios se extenderá a la mayoría de las localidades de la Costa del Sol.
Compradores en su mayoría extranjeros
El perfil del comprador de viviendas de primera y segunda residencia en la Costa del Sol continúa siendo mayoritariamente extranjero, acaparando más del 80 por ciento de las compras, principalmente el procedente de centro y norte de Europa. Por nacionalidades destaca el inglés, expectante por la situación del Brexit, el holandés, el belga, el francés y el procedente de los países escandinavos, entre otros, seguido también del cliente árabe en busca de un producto más exclusivo y de alta gama. Por eso no es de extrañar que en una misma urbanización de la costa lleguen a convivir hasta 30 nacionalidades distintas.
Estos llegan atraídos, principalmente, por el clima, seguido de la oferta. Además, su cercanía con el aeropuerto de Málaga y las conexiones con otras provincias de Andalucía lo hacen también más atractivo para los visitantes que finalmente deciden instalarse en la zona o comprar una segunda residencia para pasar sus vacaciones, vivir en la costa durante varios meses al año, una modalidad cada vez más extendida gracias al teletrabajo, o donde disfrutar de su jubilación.
Asimismo, la proliferación de colegios internacionales en los diferentes municipios de la costa ha facilitado la llegada de familias extranjeras cada vez más jóvenes con menores a su cargo dispuestas a instalarse en la zona. Silvia Sánchez, directora territorial de Aedas Homes en la Costa del Sol, cuenta como algunos de estos clientes optan por trasladarse definitivamente a la Costa del Sol mientras van y vienen todos los meses a sus países a visitar a sus familiares. “Han dejado cero grados para tener 22, sus hijos hacen vela y están en colegios internacionales. Han ganado en calidad de vida y solo les separan unas horas en avión de sus familias; y no es el único”, asegura.
En lo que se refiere al tipo de vivienda, demandan en su mayoría viviendas amplias, en una sola planta, y con grandes terrazas donde se valora especialmente las vistas al mar y la cercanía a campos de golf. Así, los más jóvenes optan por urbanizaciones cerradas en el extrarradio con acceso a zonas comunes, mientras que los más mayores o familias con hijos independizados prefieren integrarse en el casco urbano y su comercio.
En cuanto al cliente español, este suele ser principalmente procedente de Madrid o el País Vasco en busca de una segunda residencia en la que pasar sus vacaciones en la costa con la familia. Por otro lado, también destaca el comprador local que adquiere una segunda vivienda para fines turísticos.
Por último, en cuanto al precio, de la vivienda de obra nueva coinciden en que la tendencia es al alza, por lo que seguirán subiendo conforme vaya creciendo la demanda, pero de forma moderada.
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