De turismo cultural por la Plaza de la Catedral de Almería y sus rincones
La Almería de Maribel
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Para hablar de la monumental Catedral-Fortaleza que posee Almería, cuna del Turismo Cultural, junto con La Alcazaba, hay que remontarse al año 1522. Un fatídico 22 de septiembre de 1522, hizo que la tierra temblará a un nivel impensable. El más devastador y trágico movimiento sísmico que se conoce en nuestra ciudad, tuvo consecuencias desoladoras: las construcciones religiosas hasta entonces construidas, se derrumbaron sobre los sacerdotes y fieles que estaban celebrando los oficios, sufriendo paralelamente el hundimiento de infinidad de casas que aplastó a familias completas. El bullicioso barrio de la Medina, tan lleno de vida hasta entonces, quedó totalmente arruinado y estuvo durante mucho tiempo despoblado. Muchos de los habitantes que sobrevivieron, se marcharon a vivir al arrabal de la Musalla, el barrio más grande y deshabitado por ser zona principalmente de Vega. Pero a partir de aquel terremoto, dicho arrabal, que se extendía desde la calle de la Reina a la Rambla Obispo Orberá fue poblándose cada vez más. La antigua Catedral de la Medina, ubicada en la antigua Mezquita Mayor, quedó semiderruida y se decide por orden de Carlos I, construir una nueva catedral en el antiguo arrabal de La Musalla. La primera piedra fue colocada en octubre de 1524, y a partir de 1525 se empieza a construir la Catedral Fortaleza, a instancias del Obispo Fundador, Fray Diego Fernández de Villalán. Es la única Catedral Fortaleza de dicho periodo en la Península Ibérica y la única con Claustro en Andalucía. Se construyó como fortaleza para defensa de la población de turcos y piratas berberiscos.
Tras el terremoto, en el que la Alcazaba, principal baluarte de la ciudad, también se resintió, Carlos I de España se volcó en la reconstrucción de la ciudad y por ello Almería pudo levantarse de dicha catástrofe y pudo tener una nueva y singular Catedral. Catedral, en la que su estructura interior de finales del gótico y principios del renacimiento es un templo religioso con sus naves, su Altar Mayor, Sacristía, Capillas, Girola, Trascoro y Coro, contrastando en cambio con su exterior, rodeado de torreones en las esquinas y grandes contrafuertes que bien parece un castillo, al concentrarse solo la decoración en las dos portadas que posee: la de los pies, llamada de los Perdones y la de la Plaza de la Catedral, la más decorada y monumental, ambas renacentistas del siglo XVI y obras de Juan de Orea.
En la Plaza reformada a finales del pasado siglo XX, destaca su zona peatonal con suelo de mármol de Macael, con altas palmeras que se corresponden con los contrafuertes de la fachada, y sin apenas decoración para que los visitantes dirijan sus ojos solo hacia el monumento catedralicio. En dicha Plaza se puede admirar la fachada de una vivienda burguesa que se ha convertido en un hotel con encanto y el Palacio Episcopal, ambas construcciones del siglo XIX. En un extremo de la Plaza junto a la torre campanario, se encuentra la escultura del Obispo D. Diego Ventaja, martirizado en la Guerra Civil Española.
Cercana a la Catedral se encuentra la iglesia y convento de la Purísima Concepción (Las Puras), fundado en el siglo XVI en el año 1515. Hay que destacar la portada barroca y la torre mudéjar. Se remodela su interior entre el siglo XVII y XVIII, y destaca su artístico retablo barroco en el altar Mayor. En uno de los Patios Porticados que alberga se admira su estructura plenamente renacentista.
En la misma calle de José Angel Valente, se sitúa la Casa del Poeta, propiedad del Ayuntamiento de Almería. Es la Casa de José Ángel Valente, poeta y ensayista que vivió en nuestra ciudad y en dicha casa durante quince años, de 1985 a 2000, año de su fallecimiento. Es una vivienda del siglo XIX, que puede ser visitada todos los fines de semana,
Si seguimos por esta misma calle, llegamos hasta la Plaza Campoamor que está presidida por el bajorrelieve de San Valentín rodeado con una verja y candados para perpetuidad del Amor. El bajorrelieve es obra de Jesús Pérez de Perceval. Frente a dicha Plaza, se alza el monumental edificio perteneciente a la antigua Casa de los Marqueses de Cabra, actual Archivo Municipal “Adela Alcocer”.
Desde la Plaza de la Catedral, se accede a la señera calle Cubo, donde se muestra el majestuoso “Sol” tallado durante la época de Villalán, que es el emblema de la ciudad de Almería. Es un Sol antropomorfo con cara boca y ojos, que representa la cristiandad, simula la cara de Cristo y está mirando hacia levante. Tallado en uno de los torreones más importantes de la Catedral-Fortaleza, se corresponde interiormente con la capilla más antigua de la catedral de finales del gótico, la del Santo Cristo de la Escucha, que la preside la escultura devocional del Cristo y el sepulcro en mármol y alabastro del Obispo fundador de la Catedral: Fray Diego Fernández de Villalán.
La calle Cubo, desemboca en una plazoleta recoleta, la Plaza Bendicho, con un encanto especial, ajardinada y donde se alza el busto de una mujer valerosa: Celia Viñas, que llegó a Almería en 1943 y revolucionó la cultura almeriense. Profesora del Instituto de Segunda Enseñanza (actual Escuela de Artes) motivó con su didáctica a sus queridos alumnos. La casa más antigua de Almería que allí se encuentra es la de los Puche (del siglo XVII), rehabilitada y sede de la Cofradía del Prendimiento. En su fachada aparece el escudo nobiliario y los balcones con su característica rejería y guardapolvos. Es representativo en su interior su patio central porticado y el aljibe privado.
Detrás de la Catedral, se encuentra el Museo de la Guitarra, uno de los espacios museísticos que posee la Red Municipal de Museos del Ayuntamiento de Almería, y espacio dedicado al insigne lutier que nació en la tradicional barriada de la Cañada, Antonio de Torres.
El 27 de septiembre fue el día Mundial del Turismo y este mes de octubre se celebra el V Centenario de la colocación de la primera piedra de la Catedral. Almería tiene los suficientes recursos patrimoniales, históricos y culturales para ser calificada como una ciudad con un RICO TURISMO CULTURAL.
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