El turismo duplica los nuevos contratos en diez años y supera los 63.000 en 2018

El fuerte tirón del turismo en los últimos años ha convertido al sector en uno de los pilares de la economía provincial y ha conseguido que la cifra de los nuevos empleados en la hostelería y en empresas de restauración y oferta complementaria se haya duplicado pasando de los 25.796 contrataciones contabilizadas en 2008 a las 63.526 que se dieron en el pasado ejercicio, de las que 29.537 corresponden a hombres y 33.989 a mujeres, según los datos del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE).

Datos de los nuevos trabajadores del sector con los que se han batido todos los récord de ocupación en este sector y posiblemente el año en curso sea aún mejor por el rendimiento para la restauración y los hoteles de que Almería sea Capital Española de la Gastronomía. En la última década el peor año fue 2011 con 24.804 nuevos contratos, casi un tercio de los que se han contabilizado en el último ejercicio para prestar servicio a los más de 2,5 millones de turistas que llegaron a la provincia.

El salto cuantitativo más importante en el empleo turístico se produce entre los años 2015 y 2016 en el que crece en 8.343 contrataciones y en el anterior el aumento fue de 7.926 personas. De hecho, entre los años 2012 y 2017 se creció en más de 5.000 incorporaciones por año, lo que evidencia la evolución favorable del negocio turístico en la provincia, según los datos del SEPE. El grado de ocupación de los hoteles de la provincia en el último año fue de casi un 50%, según los últimos datos de la Encuesta de Coyuntura Turística de Andalucía, cuando hace una década la media se situaba en el 45%. Y es que a principios de siglo -años 2000 y 2001- no llegaban a los municipios almerienses ni 400.000 visitantes entre junio y septiembre y hoy son más del doble que disparan las pernoctaciones hasta máximos históricos.

El empleo en los establecimientos hoteleros también evidencia una continua mejoría pasando de una plantilla en su conjunto de 2.576 en 2014 a los 3.123 de media con los que se cerró el último ejercicio en el que Almería fue la provincia que más creció de Andalucía en turistas, un 6,1% más, alcanzando también el movimiento hotelero sus mejores datos de viajeros alojados (1.496.634) y pernoctaciones (5.581.610). Los sindicatos vienen denunciando que el empleo era la cara B del turismo por la precariedad, temporalidad y bajos sueldos, pero en el último año se ha conseguido cerrar una subida salarial del 5% a través de un convenio colectivo que ya no es el más bajo de Andalucía.

Cuando el destino se gestaba a principios de los sesentahabía en la provincia una planta hotelera de seis establecimientos (Hotel Goya, residencia Fátima, Pensión Andalucía y hotel Simón en la capital; Hotel Abdera en Adra y en Pulpí la Pensión Calipso). Ni 300 habitaciones en su conjunto. Hoy la capacidad de la provincia es de más de 80.500 plazas, según el Registro de Turismo de Andalucía, en el que se computan 4.820 negocios y establecimientos en el que se han incluido las 3.518 viviendas con fines turísticos ya regladas. En 2017 eran 69.647 camas y 46.002 en 2007.

El auge del destino no solamente se percibe en los hoteles. Paseos en catamarán y camello, rutas en quad, visitas a bodegas, kayak en las playas del parque natural... las empresas de la oferta complementaria eran 113 en 2017, más del doble de las que había en 2012 (51), y durante 2018 siguieron creciendo los negocios orientados al visitante hasta alcanzar los 220. Según los últimos datos de la Encuesta de Coyuntura Turística de Andalucía, la estancia media de los visitantes en la provincia son 7,8 días y el gasto diario de 61,5 euros.