El supuesto robo de un móvil que acaba con un condenado por denuncia falsa

Un móvil que nunca fue robado condujo en su momento a la detención del hombre que lo había comprado, y ahora a la condena del primer propietario, que fue el que denunció la inexistente sustracción ante la Policía Nacional, iniciando así un proceso judicial que sólo sirvió para perder tiempo y dinero.

En concreto, el ahora condenado, un hombre de origen marroquí, acudió sobre las seis y media de la tarde del 9 de noviembre de 2020 a la Comisaría Provincial de Almería para denunciar que una hora y cuarto antes dos rumanos habían salido a la carrera con un Samsung Galaxy Note 10 Plus, valorado en 559 euros, que les había ofrecido para comprar.

Dos días más tarde regresó a estas dependencias policiales de la capital almeriense para prestar una nueva declaración, en la que identificaba fotográficamente como autor del robo a un hombre de origen rumano. Según el ahora condenado, era una de las dos personas que se le habían acercado en las proximidades de una tienda de compra-venta ubicada en la avenida de la Estación simulando interés en adquirir el terminal para hacerse con él acto seguido.

Sin embargo, tal y como refleja el fallo, este último varón no había sustraído el móvil, sino que se lo había comprado al acusado por el precio de 270 euros.

Claro que en ese momento esto no se sabía aún, por lo que el rumano fue detenido en la vía pública poco antes del mediodía del 12 de noviembre de dicho año, aunque unas horas después quedó libre tras declarar ante la Policía Nacional.

Algo que no impidió que se incoasen diligencias previas contra él en el Juzgado de Instrucción número 3 de Almería, que finalmente fueron sobreseídas provisionalmente el 15 de febrero de 2021, a través de un auto en el que también se acordaba la deducción de testimonio contra el marroquí por denuncia falsa.

Un delito por el que finalmente ha sido condenado al pago de una multa de 2.730 euros y por el que también tendrá que indemnizar al hombre al que denunció con 500 euros, en este caso por el daño moral ocasionado.