"Si estuvieseis en Rusia os metía dos balazos": atenta contra guardias civiles tras un altercado con su madre

Una juez de Almería ha impuesto una pena de un año y nueve meses de cárcel a un acusado juzgado por atentar contra agentes del instituto armado, a los que llegó a indicar que de estar en su país natal les hubiese pegado "dos balazos".

La Guardia Civil acudió sobre las siete y veinte de la mañana del pasado 17 de agosto al domicilio en Aguadulce del acusado, ya que se había solicitado su presencia por un altercado que este varón de origen ruso había tenido con su madre.

Cuando los agentes llegaron al lugar, el sospechoso no se encontraba en la casa, pero a través de una llamada telefónica les manifestó: "¿Quiénes sois para aparcar así el coche? Que sois muy chulos yendo así por la vida, que luego os quitáis el traje y sois unos maricones de mierda".

Tras la llamada los agentes comenzaron a buscarlo por los alrededores, localizándolo en un descampado próximo a la vivienda. Así, le pidieron que se identificase, pero el procesado se negó de "manera reiterada a ello" y emprendió la huida a la carrera en "actitud agresiva y desafiante".

Los agentes lograron alcanzarlo y se inició un forcejeo en el suelo, dada la "fuerte oposición" que presentó el acusado a ser detenido.

También se negó de forma violenta a entrar en el coche oficial, toda vez que intentó "atemorizar" a los guardias diciéndoles: "Os voy a matar uno a uno, a vosotros y a vuestra familia, maricones de mierda, que sois unos nazis, que si estuvieseis en Rusia, os metía dos balazos".

No era el primer incidente de este tipo protagonizado por el acusado, ya que en mayo de 2021 ya le fue impuesta una pena de dos años, dos meses y dos días por un delito de atentado.

Algo que provoca que ahora se aplique la agravante de reincidencia en otro delito de atentado a agentes de la autoridad, por el que le ha sido impuesta una pena de un año y nueve meses de cárcel, menor de lo que podría haber sido gracias al reconocimiento y conformidad con la petición de la Fiscalía por parte del procesado.

Por otro lado, se le ha impuesto una multa de 90 euros por un delito leve de lesiones, y el abono de una indemnización de 200 euros a uno de los agentes.

La magistrada Juana Cortés ha acordado la suspensión de la pena de cárcel durante tres años, a condición de que no vuelva a delinquir en este periodo.