Pobreza infantil en Almería: los municipios que más problemas tienen

La pobreza infantil es un problema complejo, ya que afecta a personas particularmente vulnerables que deberían estar especialmente protegidas. Más allá de la carencia económica, la pobreza influye en otros derechos fundamentales. La dignidad y la autoestima de los niños también se ven comprometidas, y esta situación limita el ejercicio de sus libertades individuales.

En la provincia de Almería, la situación no es ajena a la pobreza infantil. Aunque en términos generales no es la más afectada dentro de Andalucía, algunos municipios destacan por sus altas tasas de riesgo entre los menores. Gádor es el municipio almeriense con el mayor porcentaje de pobreza infantil, afectando al 61% de sus habitantes menores de 18 años, según datos del Alto Comisionado contra la Pobreza Infantil del Gobierno de España y el Instituto Nacional de Estadística (INE). Le siguen Níjar con el 59,9%, La Mojonera con el 56,6%, Vícar con el 55,4% y Turre con un 54,8%. El Poniente almeriense es, en términos generales, quien concentra una mayor pobreza infantil.

Almería es la segunda provincia de toda España con mayor porcentaje de menores en riesgo de pobreza, alcanzando el 40%. Esta cifra resalta la gravedad del problema en la región, a pesar de que otras provincias andaluza registran tasas más altas en municipios específicos. La situación en Almería refleja el reto de garantizar derechos y condiciones de vida dignas para la población infantil, especialmente en zonas rurales y del Poniente almeriense, donde los menores se enfrentan a limitaciones significativas.

El municipio de Andalucía con el mayor número absoluto de niños en situación de pobreza es La Campana, en la provincia de Sevilla, donde 4.714 menores están en riesgo, lo que representa el 54,6% de la población. Albuñol, en Granada, tiene la mayor tasa relativa, con un 69,9% de sus menores en pobreza.

Otras localidades andaluza con tasas de pobreza infantil superiores al 60% incluyen Alcalá del Valle en Cádiz, Deifontes, Fuente Vaqueros, Iznalloz, Molvízar y Pinos Puente en Granada, Jódar en Jaén, Cómpeta y Periana en Málaga, y Badolatosa y Villanueva de Ríos y Minas en Sevilla. Granada es la provincia con mayor número de municipios de al menos 2.500 habitantes con más del 60% de sus menores en riesgo de pobreza.

En el resto de España, el Atlas Estadístico de las Áreas Urbanas del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana revela que, aunque solo el 9% de los municipios del país se encuentran en grandes áreas urbanas (GAU), estas concentran cerca del 70% de la población.

Según el Alto Comisionado Contra la Pobreza Infantil, las mayores concentraciones de niños y adolescentes en situación de pobreza se localizan en las áreas metropolitanas de las grandes ciudades, probablemente debido a la migración de la población local hacia las afueras por motivos de asequibilidad. Esto es evidente en Madrid y Barcelona, pero también en Valencia y Sevilla. En Málaga, las mayores tasas de pobreza infantil se encuentran en la capital, aunque municipios más alejados, como Mijas o Fuengirola, también presentan altos niveles de desigualdad.

En términos relativos, Sevilla y Málaga tienen las tasas más altas de pobreza infantil, lo cual se refleja en el predominio del color rojo y naranja en los mapas de estas ciudades. Sin embargo, la desigualdad es más pronunciada en Madrid, donde se observan zonas muy deprimidas junto a áreas más privilegiadas.

El área urbana de Madrid tiene el mayor número de menores de 18 años en situación de pobreza en España, con cerca de 230.000, lo que representa un 9% del total nacional. En Barcelona, la cifra alcanza los 160.000, mientras que en Valencia, Sevilla y Málaga se sitúa en alrededor de 60.000 en cada área urbana.

Por otro lado, en Madrid residen 230.000 niños y adolescentes en hogares con rentas superiores al 200% de la media nacional, comparado con 12.000 en Málaga, 19.000 en Sevilla y 24.000 en Valencia. En Barcelona, este número asciende a 60.000.