El 14% del personal sanitario de Almería ha sufrido agresiones

Una radiografía cruda y alarmante: el 14% del personal sanitario en Almería ha sido golpeado por la violencia en el ejercicio de su vocación, según un estudio exhaustivo realizado por el sindicato CCOO. Estas sombrías estadísticas, que abarcan desde 2007 hasta 2022, ponen de manifiesto una realidad preocupante que demanda atención inmediata.

Desde que se inició el conteo en 2007, prácticamente desde que los incidentes comenzaron a documentarse, hasta el año 2022, el estudio de CCOO revela que un 16% del total de las agresiones en el ámbito sanitario han sido físicas, mientras que el 38% restante ha sido en forma de agresiones verbales. Sin embargo, cabe resaltar que estas cifras podrían subestimar la verdadera magnitud del problema, ya que solo consideran incidentes que fueron denunciados y registrados en el Registro Informatizado de Agresiones (RIAC).

En los primeros seis meses del año en curso, la provincia de Almería ha sido testigo de cerca de medio centenar de agresiones al personal sanitario, una cifra que se distancia en algo de las 66 agresiones reportadas durante el mismo período en 2022.

El análisis de datos abarcando desde 2007 hasta 2022 arroja luz sobre la cruda realidad que enfrenta el sector de la salud en la comunidad andaluza. En este período, se han registrado un total de 16.509 agresiones en Andalucía. Esto significa que un 16,15% de la plantilla del sistema público de salud en la comunidad autónoma ha sufrido algún tipo de agresión física o verbal durante ese lapso. A nivel provincial, las cifras varían, con Málaga liderando el porcentaje de personal afectado con un 20,60%, seguida de Huelva (20,38%), Córdoba (19,10%), Jaén (17,84%), Sevilla (16,77%), Almería (14,16%), Cádiz (13,04%) y Granada (9,08%).

Las agresiones físicas representan el 21,28% del total de agresiones registradas en Andalucía durante el período en estudio, con un total de 3.514 casos. Las agresiones verbales, por su parte, constituyen el 78,72% restante, sumando 12.962 casos. Estas cifras reflejan la gravedad de la problemática, con una de cada cuatro agresiones siendo de naturaleza física.

En cuanto a las agresiones no físicas, se ha observado un aumento del 26,28% en un año, especialmente en provincias como Almería y Málaga, donde han aumentado más de un 40% respecto al año anterior.

Lugares donde suceden las agresiones

Las agresiones en el entorno laboral de atención primaria suelen ocurrir con mayor frecuencia en la consulta médica (27,72%), la admisión (23,63%), urgencias (15,56%) y la consulta de enfermería (11,35%). Por otro lado, en atención hospitalaria, las agresiones son más comunes en la habitación del paciente (28,79%) y en urgencias (21,60%).

El análisis de género revela que el 71,29% de las agresiones fueron dirigidas hacia mujeres, y el 28,71% hacia hombres, proporciones que coinciden con la distribución de trabajadoras y trabajadores en el sector. Además, el 78,38% de las agresiones se dirigieron a personal sanitario, mientras que el 21,62% afectó a personal no sanitario.

Ante estas cifras alarmantes y la creciente preocupación, varios sindicatos han instado a la revisión del Plan de Agresiones de Andalucía. Según Juan José Sánchez, secretario provincial del Sindicato de Enfermería (Satse), “la agresividad en los centros cada vez es mayor” y subraya que muchas agresiones verbales no son denunciadas, lo que hace que las cifras registradas sean solo la “punta del iceberg”. La revisión de dicho plan se vuelve fundamental para abordar y erradicar esta problemática que afecta gravemente al personal sanitario y al sistema de salud en su conjunto.