¡Nunca más!
El patrimonio perdido en la Guerra
Con esta nueva sección que inicia El Diario de Almería y al que le doy las gracias por darme esta oportunidad, se dará a conocer de forma divulgativa y didáctica el Patrimonio que fue destruido en Almería durante la Guerra Civil Española entre los años 1936- 1939, temática que ha salido a la luz a través de la Editorial Círculo Rojo bajo el título “Aproximación al Patrimonio Histórico-Artístico de Almería durante la Guerra Civil Española” de Maribel García Sánchez, Licenciada en Historia del Arte, cuya memoria de Licenciatura (Tesina), versó sobre esta temática, siendo calificada con Sobresaliente “Por Unanimidad”.
El tema, queremos que despierte el máximo interés para todos los almerienses y personas que aprecian nuestra querida Almería. De esta forma podrán valorar mucho más el Patrimonio Histórico-Artístico que tenía Almería anterior a la contienda y que por una Guerra Civil “sin sentido” lo dejó herido de muerte al sufrir graves daños y pérdidas irreparables. Un aspecto de la guerra en Almería, poco investigado y oscuro, en el que se ha trabajado con mucha dedicación por la escasez y dispersión de la documentación que existía respecto al tema.
Almería en la Guerra Civil, fue una de las provincias andaluzas más dañadas en su riqueza artística, principalmente a lo que a Patrimonio Eclesiástico se refiere, que era lo que más la caracterizaba. Fue la última en ser tomada por las tropas nacionalistas. Entrando en tema, subrayar la finalización hace escasos días de la Semana Santa de Almería 2019, que ha salido este año por vez primera ya Declarada de Interés Turístico Nacional.
Imágenes de gran tradición en nuestras procesiones, como el Nazareno de Las Claras, El Cristo de La Escucha de la iglesia Catedral o “La Soledad” de la Iglesia de Santiago, fueron destruidas en la Guerra. Las Hermandades después de la Guerra, de nuevo pudieron tener a sus imágenes titulares, por las fieles copias que se hicieron de las mismas. La imagen que sí se pudo salvar por una estratagema, fue La Patrona de Almería, La Virgen del Mar, la imagen, que data de los siglos XII-XIII y la más antigua que conserva la ciudad. Por otro lado, en cuanto a estructura arquitectónica y otros tesoros artísticos que encerraban los edificios religiosos, subrayar los serios y trágicos daños sufridos en iglesias de la talla de La Catedral- Fortaleza, La iglesia convento de Las Claras, Santo Domingo (Santuario de la Virgen del Mar), San Pedro o La de Santiago. Cada una de ellas con diferentes estilos artísticos, como renacimiento, barroco o neoclásico.
Almería tenía igualmente una riqueza arquitectónica civil, que sufrió también los atropellos de la Guerra Civil: caso de edificios como el antiguo Casino Cultural (finales del siglo XIX) y actual sede de la Delegación del Gobierno de la Junta de Andalucía, la Estación del Ferrocarril o el Chalet de D. José Battlles, una vivienda neomudéjar actualmente sede de Alcaldía del Ayuntamiento de Almería, que después de la Guerra fue transformada para convertirse en el “Preventorio del Niño Jesús”.
Hay que poner de relieve que el monumento más importante de la ciudad, que forma parte de nuestras raíces ancestrales: La Alcazaba, característica fortaleza árabe, no sufrió daños, resultando afortunadamente ilesa, aunque se encontraba en un serio estado de abandono desde hacía ya años.
En cuanto a los bombardeos efectuados en nuestra capital en dicho período, hay que destacar que infinidad de casas particulares, edificios civiles y religiosos, se vieron afectados arquitectónicamente por esta circunstancia, siendo el que mayor daño causó el bombardeo alemán del 31 de mayo de 1937, donde Almería, quedo semi enterrada. Viviendas totalmente destruidas y edificios religiosos muy afectados como es el caso de la tradicional iglesia de San Juan del barrio de La Almedina.
Otro aspecto de la guerra desconocido y de suma importancia es “La Junta del Tesoro Artístico”. Durante la Guerra Civil se formó en nuestra capital y provincia, así como en todas las capitales de España, una Junta del Tesoro Artístico de manos de la República, cuya función principal fue la de salvaguardar aquellas obras de interés artístico para su mejor estado y conservación, dadas las vicisitudes poco propicias por las que estaba atravesando el país. El retablo barroco del convento de Las Puras, la imagen de la Purísima del siglo XVII o los altares laterales también del mismo estilo pudieron salvarse gracias a la labor de la Junta que se creó en Almería.
Cada artículo escrito todas las semanas en El Diario de Almería, no será continuación el uno del otro, al lector interesado en este tema hay que sorprenderle porque el tema lo merece. La sección será el Patrimonio Perdido en la Guerra, pero no continuará un artículo con el de la semana anterior, serán artículos diferentes que engancharán al lector.
Antes de finalizar este artículo, tengo que poner de manifiesto mi indignación hacía este tema. Evidentemente las víctimas humanas son lo principal, pero una ciudad nunca debe perder el Patrimonio de toda una vida. No busquemos culpables, quizás en aquel tiempo el amor hacia el Patrimonio y la Cultura de nuestra ciudad no estaban muy arraigados. Por ello los bombardeos y los saqueos a los que se vio sometida nuestra riqueza artística y arquitectónica fueron tan crueles porque no se pensó en las consecuencias posteriores.
Lo único que los almerienses no tenemos que olvidar es que su ciudad tenía un Patrimonio Arquitectónico e Imágenes Tradicionales muy arraigadas, hasta que la Guerra Civil se las arrebató. Por ello es nuestro deseo que esas trágicas circunstancias de la Guerra no se vuelvan a repetir, para que nuestro Patrimonio Histórico Artístico, del que nos debemos sentir muy orgullosos, no quede NUNCA MÁS, en tan trágico estado.
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