Murieron durante un pago de droga: la ejecución de los jóvenes de Los Molinos, vinculada al narcotráfico

El homicidio de dos jóvenes de entre 20 y 30 años, cuyos cuerpos sin vida y con heridas por arma de fuego fueron hallados en julio del año pasado en el barrio almeriense de Los Molinos, se produjo durante un encuentro con el hombre detenido este martes para realizar un pago de droga.

Así lo ha apuntado este viernes en un comunicado la Comisaría Provincial de Almería, que ha precisado que, de las declaraciones de testigos se desprende que, los fallecidos habrían concertado un encuentro con el detenido para la entrega de una suma de dinero vinculada al tráfico de drogas desde Marruecos.

Han añadido que el detenido, a quien se le imputan dos delitos de homicidio, tráfico de drogas, tenencia ilícita de munición, defraudación de fluido eléctrico y pertenencia a organización criminal, ha sido puesto a disposición del Juzgado de Instrucción número 6 de Almería, que decretó su ingreso en prisión provisional.

Los cuerpos de las dos víctimas, de origen marroquí y vinculadas al tráfico de drogas, fueron hallados sin vida en un aparcamiento de la calle Pilones el pasado 21 de julio.

La investigación, llevada a cabo por el Grupo IV de Homicidios de la Brigada Provincial de Policía Judicial, ha concluido con una operación policial en la que también se ha desmantelado una infraestructura dedicada al tráfico de drogas en la capital almeriense.

Los hechos ocurrieron de madrugada, cuando varios vecinos de Los Molinos alertaron al servicio 091 al haber escuchado varias detonaciones en la zona. Los agentes desplazados hasta el lugar de los hechos hallaron a las víctimas sin vida junto a un vehículo con evidentes signos de haber sido tiroteados con el mismo arma.

Tras una investigación que fue acumulando evidencias que apuntaban al detenido, el pasado 25 de marzo, previa autorización judicial, se realizaron entradas y registros en dos domicilios vinculados al investigado, hallándose en uno de ellos una plantación indoor con 600 plantas de marihuana y más de cuatro kg de cogollos, además de casi medio kilo de cocaína, “tusi”, balanzas de precisión, dinero en efectivo, varias tarjetas SIM, documentación y munición de distinto calibre.

Durante los registros también se intervinieron dos vehículos, uno de ellos de alta gama, ya que estos automóviles pueden estar relacionados con la investigación.