Un reto tan duro como apasionante: de Almería a Santiago en silla de ruedas

Hace tiempo que el Camino de Santiago dejó de ser una aventura exclusivamente del norte de España para convertirse en un elemento turístico más de la gran mayoría de ciudades. Turístico, deportivo, religioso, social... Cualquier adjetivo vale para la peregrinación al Campus Stellae.

Almería será testigo de la primera expedición en el mundo en recorrer la ruta Mozárabe del Camino de Santiago en silla de ruedas. Arrancará hoy sábado desde la Plaza de la Catedral para recorrer los 1.400 kilómetros que separan Almería de la tumba del apóstol. La peregrinación se inicia en el Camino Mozárabe, que atraviesa Andalucía, hasta llegar a Mérida y continuar su camino por la Ruta de la Plata.

Ayer, el concejal de Promoción del Ayuntamiento de Almería, Carlos Sánchez, les dio la bienvenida en la Plaza de la Catedral. El edil resaltó que “es importante ayudar a estas asociaciones que tratan de dar visibilidad a las llamadas enfermedades raras y apoyar su causa. Para nosotros es un orgullo que hayan elegido a nuestra ciudad como punto de partida de esta ruta solidaria”.

En esta pequeña recepción, previa a su salida, participaron distintas asociaciones de discapacitados provenientes de toda la provincia, las cuales quisieron arropar a los protagonistas de esta historia y darles ánimo. Entre ellos estuvieron el presidente de la Federación Española de Asociaciones de Amigos del Camino de Santiago, Jorge Martínez-Cava. Incluso el obispo de la ciudad, Antonio Gómez Cantero, departió un rato con los protagonistas de este reto justo a su salida de la Catedral, recordando con ellos momentos vividos en el Camino y lugares visitados por el representante de la Diócesis.

Esta aventura trata de visibilizar las enfermedades raras y recaudar fondos para su investigación a través de la Fundación Isabel Gemio, la cual dispone de un comité científico formado por los neurólogos más prestigiosos de España. En concreto, los vascos José Ignacio Fernández y Rubén Zuluela, con la inestimable ayuda de Antonio González, recorrerán la ruta más larga de cuantas existen en nuestra península.

Después de recorrer en 2019 el camino francés desde Roncesvalles a Santiago y cruzar en 2021 el desierto de los Monegros, ahora la asociación se embarca en este proyecto de 20 días de duración para difundir de forma más amplia este proyecto. Además, aprovechando que es Año Jubilar, pretenden que su labor llegue a muchos peregrinos.