Un millón de euros dedicará Almería capital a la 'guerra' contra los mosquitos y plagas

La capital almeriense destinará un millón de euros para disponer de los recursos humanos y mecánicos, como vehículos especiales, cañones de dispersión o drones, en la guerra que periódicamente libra la ciudad contra los mosquitos y otras plagas. Es el presupuesto que el Ayuntamiento de Almería ha reservado en la nueva contratación, por un periodo de dos años, de los servicios de control, desifencción, fumigación y exterminio de insectos y ratas. 

El proceso administrativo de esta licitación acaba de arrancar con la publicación del anuncio previo de la misma en el Portal del Contratante, dado el nutrido importe que el Ayuntamiento dedicará a estos necesarios menesteres, especialmente a las puertas del verano cuando los mosquitos se convierten en un sinvivir, sobre todo en núcleos de la capital con acumulaciones de agua como los humedales.

El servicio lo presta actualmente la empresa Athisa Medio Ambiente y consiste, en la batalla contra los insidiosos alados, en un meticuloso proceso que comienza mucho antes de las molestas picaduras. El pliego de condiciones, en el que el Ayuntamiento recoge los requisitos que busca en los servicios, no ha sido todavía publicado, pero vendrá a repetir el sistema de prevención consistente en el diagnóstico y detección de los focos larvarios, lo que permite al Consistorio y empresa identificar las zonas de mayor riesgo. De hecho, antes de la primavera de este año, se llevó a cabo un monitoreo continuo, mediante el análisis de las aguas retenidas para detectar tempranamente la presencia de larvas de mosquitos, realizar el tratamiento y evaluar la efectividad de las medidas de control implementadas.

Además, se llevan a cabo tratamientos selectivos con adulticidas en áreas específicas que presentan una mayor incidencia de mosquitos, poniendo especial énfasis en entornos húmedos como imbornales, ramblas, zonas ajardinadas y cualquier lugar propenso a la acumulación de agua.

Entre otros lugares, se ha actuado en los imbornales y charcos de la barriada de Cabo de Gata y Camino de Pujaire; en Retamar y El Alquián; en La Cañada; en Costacabana en la zona de los eucaliptos y de la antigua depuradora así como en la Rambla del Charco; además de en todas las zonas con acumulación de agua del Río Andarax.

También se realizan tratamientos en los imbornales del Parque Nicolás Salmerón, del Paseo de Almería, de la Plaza de la Constitución, de Puerta Purchena, del Parque de Oliveros, Artés de Arcos, Avenida Federico García Lorca, Rambla Amatisteros, Avenida Santa Isabel, Ciudad Jardín, 500 Viviendas, Cortijo Grande, Zapillo Sur, Avenida Vega de Acá, Recinto Ferial, Carretera de Ronda, Avenida Padre Méndez, calle Santiago y calle Grecia, entre otros, dentro de un plan de acción que también atiende a las necesidades puntuales que puedan ir surgiendo en puntos de la ciudad.