Mejor los toreros que los toros en el primer festejo de la feria de Santa Ana de Roquetas de Mar

Roquetas nunca falla al menos desde que el Ayuntamiento se hizo cargo de la Feria Taurina. Son sólo dos festejos (¿no podrían ser ya tres?) pero con sendos carteles inmejorables y la respuesta de los aficionados casi llenando la plaza; si a eso sumamos el correcto juego de los toros el buen tiempo (ambas cosas imprevisibles), podemos decir, sin miedo a equivocarnos que estamos ante la mejor Feria de España en una plaza de tercera.

Sé que para ser de segunda hace falta cumplir unos requisitos que hoy por hoy Roquetas no cumple; por ejemplo dar un número mayor de festejos al año. ¿No hay posibilidad de estudiar cómo cumplir ese ‘ascenso’ y subir de categoría? Este año con una novedad: la concesión de trofeos a los mejores de cada categoría (toreros, novilleros, subalternos) democráticamente votados por los asistentes en una papeleta que se da a la entrada. Lo dicho:¡a segunda,oé! y ¡me quejo: queremos tres festejos! Es una gozada asomarse al coso y verlo ‘hasta la bandera’.

Un público fiel y animoso

Eso sube la moral a los toreros (y ayer al rejoneador) y los predispone a no defraudar a un público tan fiel y animoso, pues todos son aplausos y ¡olés! a lo largo de la lidia. Quizá demasiado generosos a la hora de pedir orejas pero... estamos en feria y no puede faltar la alegría; y si a eso le sumamos los 20 minutos de merienda con la correspondiente bebida, ¡qué les vamos a reprochar!

Lo artístico ya lo hemos sintetizado en la ficha: dos orejas per cápita y triple salida a hombros por la Puerta Grande. Los toros colaboraron con su nobleza, rayando en la tontuna, aunque con las fuerzas justitas; y sus matadores pusieron todo de su parte, pegándose buenos arrimones para que no se les rajaran antes de tiempo y huyeran a tablas. En fin, comienzo de Feria entretenido. Y este domingo, más y ¿mejor?