Libros dedicados para las internas de 'El Acebuche'

‘A las olvidadas’ es una iniciativa de recogida de libros, ideada por Teta&Teta, para donarlos a módulos de mujeres de centros penitenciarios como ‘El Acebuche’. Libros para alejarlas mentalmente de su realidad, pero también para generar reflexión y debate en torno a un colectivo de mujeres invisible para la sociedad. ‘A las olvidadas’ empieza con una pregunta: “¿Qué libro le regalarías a una mujer que está en la cárcel?”.

Gracias a esta acción de carácter social, la prisión de Almería ha recibido un cargamento de libros en los que los donantes han dejado su firma, con una dedicatoria destinada a esa lectora privada de libertad que lo disfrutará, en la que se explica además el porqué de haber elegido ese título en concreto. Da igual la extensión, cada volumen incluye estos textos que buscan la complicidad entre dos personas que, posiblemente, nunca se conocerán.

Y para completar la curvatura del círculo, la recepción de los libros estuvo acompañada este jueves por la presentación llevada a cabo por Laura López Varón, una jovencísima escritora de 16 años que ya ha publicado ‘Diario de dos detectives’ (Círculo Rojo). Una enamorada de la literatura que comenzó a escribir sus primeros relatos cortos con tan solo cuatro años, la edad con la que aprendió a leer y a escribir.

Comenzó la escritura de su primera obra publicada en 1º de ESO y concluyó su redacción en 3º de ESO, lo que da buena idea de lo precoz de esta literata adolescente. “Mi libro va sobre dos niñas, una que tiene una manera de ver el mundo muy cerrada y otra que cree de que todo el mundo puede recibir una segunda oportunidad. Y eso porque lo que yo quiero caracterizar son las personalidades tan opuestas que hay”, explica Laura, quién asegura que asegura que con diferentes crímenes que afrontan van “aprendiendo sobre la mente del ser humano”.

Aunque era la primera vez que salía al frente de un público adulto, además tan especial como el de las mujeres presas, Laura ya ha participado previamente en presentaciones y otros actos en colegios. “Se han mostrado muy participativas y, por lo que he visto, intentan dar lo mejor de ellas mismas”, asegura la escritora.

“La literatura y la escritura tienen un gran poder en nuestras vidas y que no hay una forma errónea o correcta de verlas, sino que cada uno, a partir de su experiencia, de sus pensamientos, de sus sentimientos, va creando su propia historia, por así decirlo. Ahora, por ejemplo, podemos escribir una cosa y dentro de cinco años podemos leerla y verla totalmente diferente. He preparado varias actividades, en concreto tres, que tratan sobre eso”, explicaba Laura poco antes de desarrollar su actividad.

Por su parte, el director de ‘El Acebuche’, Miguel Ángel de la Cruz, asegura que se trata de una actividad que “tiene un contenido polivalente”. “Evidentemente, aquí lo que estamos es trabajando el contacto de las personas reclusas con el mundo exterior y a la inversa, pues a través de la colaboración de Laura y del colectivo del Grupo de Igualdad del Centro Penitenciario, se realizan este tipo de actividades, en donde las personas del exterior transmiten mensajes positivos a personas porque están reclusas, a mujeres en este caso”, apostilla.

Todo ello a la vez que reciben libros, “un instrumento de ocio, pasión y entretenimiento, de ocupación de un tiempo positivo”; además en un periodo estival, “lo que ayuda a rellenar esos huecos que ahora quedan libres de actividad”.

“Queremos agradecer a todas aquellas personas que han tenido la sensibilidad de enviar un libro dedicado a las internas, que son comunicaciones anónimas, pero cargadas de contenido afectuoso, que están siendo muy bien recibidos por parte de las internas”, concluye De la Cruz.