Retiro dorado de un kiosquillo de la Puerta Purchena junto al delta del Andarax: "Se convertirá en un vestuario"

Al final del Paseo Marítimo, en los aparcamientos copados por las autocaravanas en los últimos tiempos, se ha colado un intruso. Son centenares de almerienses los que practican deporte o pasean tranquilamente a diario por esa zona del delta del Río Andarax, arreglada recientemente, y en las últimas semanas han visto una imagen curiosa, más propia del centro de la ciudad que de la zona de expansión.

Un kiosquillo de prensa, concretamente con el rótulo Kiosco Puerta Purchena, contempla a los caravanistas que arreglan sus bicicletas o sacan sus mesas para almozar bajo el sol almeriense, a los conductores que aparcan allí sus coches para darse un baño y a los runners que hacen sus series de entrenamiento en los 3 kilómetros largos (y rectos) de Paseo Marítimo.

La imagen, curiosa, tiene su explicación. El Kiosco Puerta Purchena, después de prestar sus servicios en la princial arteria de la ciudad, ya está jubilado y le han buscado acomodo en esta zona tan relajante y cómoda de la ciudad. Tras cesar su actividad, se va a arreglar y va a sufrir un lavado de cara para convertirse en un vestuario y aseo para los alumnos que por la mañana practican deporte de playa. Economía circular en toda regla: el kiosquillo está en un perfecto estado de conservación (todavía conserva los paneles publicitarios que lo decoraban) y va a prestar un último servicio a la sociedad almeriense, ahora como lugar para asearse y cambiarse de ropa tras la práctica de deportes marítimos. Un emplazamiento idóneo para una jubilación dorada.