Freno al vandalismo en el parque de La Hoya con vigilancia privada

Almería

Personal de seguridad podría contener el uso indebido al menos durante el horario de apertura al público

Los arquitectos del parque de La Hoya demandan a Almería “amor y cuidado”

El Ayuntamiento ha colocado cartelería, en el vallado y en el interior del parque, recordando las normas de uso.
El Ayuntamiento ha colocado cartelería, en el vallado y en el interior del parque, recordando las normas de uso. / MVR

El Ayuntamiento de Almería ha contratado la prestación de servicios de seguridad y vigilancia en el parque de La Hoya (Jardines Mediterráneos), una medida con la que procurará contener los frecuentes actos vandálicos que sufre, desde su inauguración hace un año, esta zona de recreo situada en la explanda de la Alcazaba. Al menos, durante el horario de apertura al público de estas instalaciones, ya que los vecinos vienen denunciando la entrada indebida de personas para, entre otros menesteres, la celebración de botellones. 

El nuevo contrato, que incluye la vigilancia del parque de La Goleta, así como el del Andarax, le ha sido confiado a Grupo Control, empresa que ya venía desde mediados de año procediendo a la apertura y cierre de los accesos a los Jardines Mediterráneos, tras una modificación, en el mes de marzo, del anterior contrato que es sustituido por estos nuevos servicios que durarán dos años y que están ya en marcha.

Por el importe de 262.933 euros, los vigilantes de Grupo Control, la única empresa en concurrir a esta licitación lanzada el pasado verano, incluye entre sus servicios rondas en los tres mencionados parques con la disposición de un vehículo dada las amplias superficies. En La Hoya, en concreto, harán una inspección a la hora de la apertura y al cierre, cuando comprobarán que no quedan personas en su interior y, en el caso contrario, lo comunicarán a la Policía Local, especialmente si se trata de consumo de alcohol. 

La contratación incorpora la implantación de un sistema de fichaje-control con códigos QR comprobables por el Ayuntamiento, al que se le comunicará la apertura y cierre de puertas, y la instalación de un botón de pánico. El Consistorio, además, ha colocado cartelería con normas de uso y aviso de que el recinto está vigilado. 

“No hay un alma que controle nada”, se quejan los vecinos

Hasta ahora los servicios de vigilancia del parque de La Hoya no satisface a usuarios y vecinos del casco histórico, que han optado por hacer públicos desde hace semanas los continuos actos vandálicos, así como la celebración de botellones y la existencia de trapicheo por parte de personsa que se cuelan en los jardines durante la noche. “No hay ni cámaras de vigilancia ni vigilancia física. El guarda de seguridad abre las puertas a las ocho de la mañana y se va. Luego a las 8.30 viene otro para cerrar y ya es cuando la gente pasa por los recovecos”. Denuncian que han sido diversos los botellones celebrados durante el puente de la Constitución y que el huerto urbano, destrozado por vándalos y recién repuesto, está dañado por perros sueltos. Otra de las quejas. 

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