Los extranjeros ya representan el 40% de las detenciones y población reclusa de Almería

La provincia de Almería cuenta con más de 175.000 residentes procedentes de otros países, un censo de población extranjera que no ha dejado de crecer y que actualmente representa el 23% de su padrón. La inmigración ha sido uno de los pilares sobre los que se ha cimentado el milagro agrícola en los últimos treinta años y han superado por primera vez la barrera de los 80.000 trabajadores, siendo uno de los factores decisivos de su dinamismo demográfico como provincia menos envejecida y con mayor natalidad, pero también está teniendo una incidencia directa sobre las estadísticas de criminalidad en las que no han dejado de ganar peso. No es razonable asociar a los inmigrantes con la inseguridad e incremento de la delincuencia, pero es evidente que en Almería están alcanzando cotas que nunca antes habían tenido tanto en el número de detenidos e investigados como en su representatividad dentro de la población penitenciaria de la prisión de El Acebuche. 

Desde el Ministerio del Interior se viene intensificando en los últimos meses una campaña para contrarrestar los mensajes alarmistas, discursos de odio y propagación de bulos que establecen una conexión entre la comisión de delitos y los inmigrantes, principalmente africanos y del Este de Europa, en base a una serie de estadísticas que ponen de manifiesto precisamente lo contrario a nivel nacional. Los extranjeros residentes en España crecieron entre 2011 y 2023 un uno por ciento y la tasa de criminalidad convencional descendió 6,1 puntos en el mismo periodo. “No hay ningún elemento objetivo que ponga en relación a la inmigración con la delincuencia”, aseguraba esta semana el ministro Fernando Grande-Marlaska criticando que sea una estrategia de la derecha para "ganar votos". En Almería, sin embargo, las cifras son muy diferentes a las del resto del país, posiblemente porque en esta provincia hay un mayor porcentaje de foráneos de más de un centenar de nacionalidades. Cuatro de cada diez detenidos y reclusos de la cárcel almeriense son extranjeros. Es un hecho real constatado por los datos oficiales del Gobierno, no un bulo promovido por ultraconservadores en redes sociales.

Y se debe tener en cuenta precisamente para una mejor adaptación a esa nueva coyuntura delictiva por parte de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y también en el enfoque hacia la reinserción del centro penitenciario. Porque, como avisaba Ortega y Gasset, "toda realidad ignorada prepara su venganza" y en Almería esa certeza no puede ser obviada. La estadística de la prisión almeriense, facilitada a este periódico por la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias, contabilizaba 248 reclusos extranjeros en 2015, 255 en 2016, 243 en 2017 y hoy son 381. Esto supone un crecimiento del 53% en los últimos diez años. Si se tiene en cuenta que en la actualidad hay 919 internos, la representación de los foráneos alcanza el 41% del total. A nivel estatal representan el 31% de la población penitenciaria, diez puntos menos que en Almería, siendo las principales nacionalidades Marruecos, Rumanía, Portugal, Italia, Bulgaria y Francia.

385 reclusos de otros países en 2022

El pico de internos, tanto españoles como extranjeros, en El Acebuche se alcanzó en 2021 con 967, mientras que el dato más alto de reclusos de otros países se ha dado en 2022 con 385. Entre los años 2014 y 2024 se ha producido un incremento de reclusos en su conjunto del 7,4% frente al de los foráneos que ha sido del 24%. Hay que tener en cuenta en el análisis del registro penitenciario que un número importante de los presos preventivos (prácticamente la mitad), que rondan los 300 en Almería, son inmigrantes por no tener arraigo y existir un mayor riesgo de fuga. La prisión almeriense no ha bajado de los 900 presos desde el año de la pandemia -con anterioridad estaba por encima de los 800-, si bien queda muy lejos del volumen que tienen otras cárceles españolas como la de Antonio Asunción Hernández en Valencia con 2.127 o Brians 2 en Barcelona con 1.468. 

El sistema estadístico de criminalidad del Ministerio del Interior también pone de manifiesto en su informe anual el crecimiento de los delitos cometidos por ciudadanos extranjeros en Almería. En 2022 fueron detenidas e investigadas 4.307 personas y en el último año 4.692, un 8,9% más. El aumento alcanza el 60% en la última década. En 2014 eran procesados en la provincia 2.927 residentes de otros países frente a los casi 4.700 del pasado ejercicio (3.950 hombres y 742 mujeres). Teniendo en cuenta que en la provincia fueron detenidos e investigados 11.825 ciudadanos en 2023, el peso de los foráneos en el cómputo global roza el 40% frente a un 35% de representación hace diez años.