El edificio de Telvent pasa a manos municipales tras pagar 2,7 millones

Más de tres años han tenido que transcurrir para que los almerienses sean los legítimos dueños del edificio construido para albergar la Ciudad Digital. El pasado 8 del mes de julio se hacía efectiva la transferencia desde el Ayuntamiento de Almería, a través de la entidad financiera Unicaja, de un montante de 2.726.000 euros que suponen el pago a la empresa Telvent por la obra. Desde el área de Hacienda se dio curso a la factura dos semanas después de la Junta de Gobierno diera el visto bueno para realizar el abono el pasado 16 de junio.

De esta manera, el Ayuntamiento de Almería pasa a tener la titularidad del Edificio de Servicios Avanzados de El Toyo que alberga el Centro de Proceso de Datos diseñado por la empresa filial del Grupo de Tecnologías de la Información de Abengoa. Pero además, los responsables municipales podrán hacer de forma oficial el uso vecinal y ciudadano que han anunciado.

De hecho, desde Urbanismo se han expuesto los usos de la primera planta que inicialmente se encontraba vacía. La Entidad de Conservación de El Toyo, un destacamento de la Policía Local para dar cobertura a las barriadas de levante, y una zona destinada a asociaciones, cuentan con un espacio reservado en las instalaciones que se abrieron en 2005.

Precisamente, la instalación de la Ciudad Digital, sobre todo la urgencia con la que se tramitó el expediente por parte del Ayuntamiento, fue realizada en virtud de la seguridad propia de la cita deportiva mediterráneo, con la finalidad de "permitir la coordinación de la Policía Local", como explicaban los responsables de la empresa en Almería poco después de entregar los servicios.

Desde su desembarco en la capital, en 2004, las críticas por parte de los grupos en la oposición han acompañado a Telvent. Por una parte, por el procedimiento negociado que no consideraban justificado y, por otra, el precio que supondrá su puesta en funcionamiento para las arcas municipales, 27,8 millones.

Han sido muchos los meses en los que la empresa no ha obtenido ningún beneficio económico por el servicio que se está prestando y una de las principales preocupaciones para las arcas municipales era que no se cobraran intereses, como sí ha ocurrido con otras concesiones. Así, el concejal de Hacienda, Pablo Venzal, consiguió el compromiso de la empresa de no exigir la demora.

Una vez que se ha pagado la mayor de las facturas, queda por iniciar el pago del canon anual hasta sufragar el servicio, retrasado desde su puesta en marcha. Queda por determinar cuál fue el grado de implantación digital real en los primeros años, con la finalidad de hacer acopio de las partidas necesarias. El canon, según el edil responsable de las cuentas municipales, se establecerá entre los 300.000 y los 500.000 euros. Además, quedan por pagar otros muchos recibos, sobre todo, porque Telvent tiene una concesión en la capital de 20 años de duración.