¿Dejarán de comprar casas en Almería los británicos si sube el ITP? Un especialista ve una situación desfavorable
El abogado Gerardo Vázquez cree que esta medida dirigida a extranjeros no residentes puede ser un “clavo en el ataúd de la inversión británica”
El barrio de la Cruz, el ‘Bronx’ de Almería está en Pechina
El abogado de origen británico Gerardo Vázquez considera que la anunciada subida del impuesto de transmisiones patrimoniales (ITP) para extranjeros no residentes supondrá “otro clavo en el ataúd de la inversión británica en España”.
Así lo ha asegurado en declaraciones a EFE este experto en derecho inmobiliario, quien durante años fue el abogado y uno de los portavoces de la asociación Abusos Urbanísticos Andalucía NO (AUAN), que defendía los intereses de compradores de viviendas en el no urbanizable andaluz.
“Hoy mismo me acaban de preguntar unos británicos que tienen familiares que quieren comprar por la zona. Están preocupados y quieren saber si esto va a entrar en vigor”, revela Vázquez, quien recuerda la importante colonia británica en poblaciones almerienses como Albox y su entorno, o en el levante de la provincia.
El plan del Gobierno pasa por incrementar hasta el 100 % el gravamen fiscal que deben pagar los extranjeros no residentes en España cuando compran una en España, una medida que tiene que ser aprobada por el Congreso de los Diputados.
“Los británicos ya lo tienen muy difícil desde el Brexit, porque tienen que probar unos ingresos mínimos y ha habido otros problemas, por ejemplo con los permisos de conducción. Esto está previsto para que no haya tantas compraventas, para que la gente de fuera de España no suba el precio de la vivienda, pero me parece que las causas de esta subida son otras”, afirma.
“Aquí, en el sur de España, en zonas turísticas, esta medida va a ser muy dura”, mantiene el letrado, quien señala que en Andalucía las compraventas normales se tributan al 7 % en la actualidad, pasando al 14 % de aprobarse esta medida, aunque insiste en que en otras comunidades los tipos son mayores.
“Pero es que, además de eso, hay que añadir los gastos notariales y registrales, de asesoramiento inmobiliario y jurídico, ya que este último lo suelen pedir bastante los extranjeros, o los de notaría”, precisa el abogado.
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