Ni tranvía, ni metro, ni cercanías... la hoja de ruta de la Junta prioriza 15 infraestructuras

El Consejo de Gobierno del martes aprobó el nuevo Plan de Infraestructuras de Transporte y Movilidad de Andalucía (PITMA), un documento que marca la estrategia a seguir por la Junta hasta el año 2030 en relevo del Plan PISTA 2020. Después de dos años y medio de redacción y tramitación, esta hoja de ruta ha definido siete líneas de acción con una inversión estimada de 7.766 millones de euros para el conjunto de la comunidad con especial incidencia en el desarrollo de metros y tranvías andaluces y del impulso de la red viaria de titularidad autonómica. El PITMA pretende orientar las iniciativas y fondos a un cambio en las políticas de las infraestructuras basado en la movilidad sostenible, la intermodalidad y la innovación tecnológica con el objetivo de reducir las emisiones de gases efecto invernadero y la congestión urbana mejorando el transporte público y trasvasando mercancías de las carreteras al ferrocarril y vías navegables.

En base a un diagnóstico de partida sobre los flujos de la comunicación actual y los nuevos hábitos de movilidad que se han adaptado a la lucha contra el cambio climático y los efectos de la pandemia, la administración andaluza ha fijado una quincena de proyectos estratégicos en Almería dentro del PITMA y también ha elaborado un catálogo de casi medio centenar de actuaciones no priorizadas que estarán sujetas a la disponibilidad de fondos FEDER y que en su mayoría se vienen arrastrando desde hace más de una década porque ya se incluyeron en el PISTA 2020. Pero en la provincia de Almería la realidad será bien distinta. Ni tranvías, ni metros, ni conexiones marítimas, ni trenes cercanías, ni nuevas estaciones de autobuses... más del 90% de las inversiones previstas en el horizonte de 2030 -sufragadas en su conjunto con un 41% de financiación directa de la Junta, un 23% de fondos europeos y el 18% restante de partidas del Estado- se concentrará en actuaciones de mejora de la seguridad y conservación de la red viaria de titularidad autonómica con proyectos que actualmente se encuentran en estudio, redacción, licitación o incluso en obras.

Las actuaciones estratégicas del PITMA en Almería contemplan el tramo entre Olula y Fines de la Autovía del Almanzora, la variante de Cuevas, el proyecto de ejecución de puentes sobre badenes inundables en la A-399 en las ramblas de Chirivel y Pino Blanco, la variante de Vélez Rubio y actuaciones en el enlace de la A-92,el aumento de capacidad de la A-334 entre Baza y Olula, la variante de la zona costera de Mojácar en su 2ª fase (licitada en junio por 10 millones), la variante de Benahadux A-348 hasta N-340, el acceso norte a Almería en el enlace de la A-7 y A-92, la duplicación de la calzada de la carretera A-1051R4 de acceso a la Urbanización de Roquetas, la mejora del trazado y construcción de vías lentas en la A-358 entre Berja y Dalías y el eje viario del poniente almeriense en sus dos fases, el tramo de la variante de Los Llanos de Vícar a La Mojonera y el tramo de la carretera de San Agustín hasta la A-7 por Almerimar.

Otra de las intervenciones fundamentales de esta hoja de ruta de la movilidad será la conexión de la A-370 y A-7 con el Puerto de Garrucha al que se quiere dotar de una mayor capacidad dado su potencial para el transporte de mercancías. Ya se realizó un estudio informativo de este actuación de desdoblamiento de los accesos desde Los Gallardos en 2011, pero se acabó aparcando por la crisis. De hecho, el PITMA contempla un ensanchamiento del puerto garruchero y la culminación de la primera fase de la zona logística de Níjar como las únicas intervenciones no viarias que han priorizado en Almería. En paralelo al desarrollo del área logística, la Junta ha previsto la ejecución del ramal ferroviario de conexión con la Línea de Alta Velocidad a Murcia, además de la puesta en servicio de la terminal intermodal. El documento establece una inversión de más de 8,1 millones de euros para la ampliación del puerto de Garrucha que ha establecido en los siguientes hitos: en 2021 el estudio de opciones para la ampliación de la capacidad operativa (se adjudicó en diciembre de 2020), 2022-2024 para la redacción y tramitación del proyecto constructivo y 2025-2028 para la ejecución de las intervenciones y la mejora de la accesibilidad.

El PITMA ha tenido en cuenta que este recinto portuario, para el que se han contemplado otros 1,9 millones en 2023 para la rehabilitación del muelle 2, superó las 6,62 millones de toneladas en 2019, cargando más de 320 buques. Todos los puertos de titularidad autonómica prestan funciones pesqueras y náutico-recreativas constituyendo Garrucha la única instalación con tráfico comercial de mercancías relevante, con un importante movimiento de yeso que lo sitúa entre los principales puertos graneleros de España. El Plan de Infraestructuras de Transporte y Movilidad 2030 prioriza también el vial intermedio entre Roquetas y Balanegra e incluye una actuación relacionada con los nuevos accesos de El Parador parcialmente ejecutados. Sin embargo, excluye otras actuaciones históricamente reclamadas por ser de competencia municipal como las variantes de Campohermoso, Los Gallardos, Turre y Carboneras, así como el estudio de viabilidad del nuevo acceso al núcleo urbano de Cabo de Gata en el que debe intervenir la Diputación como responsable de la AL-3115.

Los expertos que han perfilado esta hoja de ruta consideran un error de asignación del organismo competente que el Plan de Movilidad Sostenible del parque natural de Cabo de Gata-Níjar lo articule la Consejería de Medio Ambiente. Además, reconocen el retraso en determinadas actuaciones pendientes del Plan PISTA 2020 como las programadas en la Autovía del Almanzora con obras en avanzado estado de ejecución entre El Cucador-La Concepción y en junio del pasado año se adjudicó el último tramo que conecta con la A-7. En materia de ferrocarril, el PITMA reconoce que la red férrea en Almería y Algeciras está obsoleta y no cumple los estándares necesarios para la intermodalidad, si bien confían en el cambio de escenario con la finalización de los tramos pendientes del AVE a Murcia en 2023. "En la comunidad autónoma se localizan dos puertos de interés general, el de Motril y Almería, que presentan una importante demanda histórica para conseguir una adecuada conexión ferroviaria para mercancías. Estos tráficos se han desplomado en los últimos años en Jaén, Málaga y Granada, llegando a desaparecer prácticamente en Almería".

La hoja de ruta de las infraestructuras del transporte insta a resolver las conexiones ferroviarias de los puertos y actualiza los plazos de la zona logística de Níjar -se anunció una inversión de 40 millones en su primera fase- que en el PISTA 2020 se había contemplado erróneamente con una tramitación muy avanzada que permitiría comenzar las obras de la primera fase a partir de 2016 con la idea de que pudiera estar en servicio antes de 2020. El PITMA no prioriza la necesidad de articular líneas de cercanías en el Bajo Andarax y el Poniente, una posibilidad que identifica a muy largo plazo siempre con la realización previa de estudios de demanda. Los expertos consideran que el Ministerio de Transportes tiene que definir la solución final del corredor Granada-Antequera que solo se circunscribe al transporte de viajeros y consideran que la alternativa pasa por la vía convencional entre Bobadilla y Granada (que tampoco permite hoy el tráfico de mercancías) o el restablecimiento del servicio de media distancia que circulaba hasta 2015 Sevilla-Granada-Almería. "Esta línea puede ser clave para la vertebración de Andalucía mediante trenes de media distancia", recoge el articulado. También resaltan la importancia a nivel regional del tramo entre Almería y Granada dentro del Corredor Mediterráneo y critican que solo tiene un estudio funcional y que está condicionado a la llegada del AVE a la capital y su integración ferroviaria.

Otra de las reivindicaciones del plan regional es la necesidad de mejorar el transporte público de los aeropuertos de Córdoba, Granada y Almería, que sólo disponen de líneas de autobuses urbanos con tiempos por encima de los 30 minutos, a su juicio insuficientes para asegurar una buena accesibilidad aérea en un escenario futuro de crecimiento de pasajeros por la mayor relevancia de las líneas de bajo coste en los próximos años. En relación a los aeropuertos, la única actuación que se recoge en el PITMA es el mantenimiento de la línea Sevilla-Almería como obligación de servicio público, una medida transitoria mientras no se establece una conexión ferroviaria adecuada entre ambas ciudades. El vuelo se ha mantenido operativo durante más de una década, con niveles de ocupación por encima del 70% en los últimos años, con una financiación autonómica de 2,3 millones anuales de a Junta. El plan recoge una prórroga del contrato entre 2022-2026 y en el escenario 2026-2030 plantea la posibilidad de retirar la OSP en función de la puesta en servicio de una línea de tren de altas prestaciones.

El PITMA también recoge casi medio centenar de proyectos, que en su mayoría también aparecía en el Plan PISTA 2020 y se han venido arrastrando sin prácticamente avances en la última década, que se podrían poner en marcha en función de la disponibilidad presupuestaria a los que no se han evaluado en el estudio ambiental estratégico. Aparecen, entre otros, dos tramos de la Autovía del Almanzora entre Baza-Purchena-Olula del Río, el eje viario del levante, la mejora funcional del camino de montaña entre Olula de Castro y Senés, la reparación de taludes de desmonte y deslizamiento en la A-1175 de Berja o la construcción de hasta cinco puentes sobre la rambla Aljibe en Lubrín, la AL-3411 de Gádor, el río Almanzora en la AL-7102 de Cantoria, el de la conexión Pechina-Benahadux sobre el río Andarax y otro en Rambla Morales a la altura de la AL-3112 en el Barranquete de Níjar.