Almería se inundará bajo el agua en este orden de municipios

La subida del nivel del mar como consecuencia del calentamiento global es una preocupación global que afecta a las regiones costeras en todo el mundo. Almería, una provincia situada en la costa sureste de España, no es inmune a los posibles efectos del aumento del nivel del mar.

El nivel del mar en la provincia de Almería subirá casi un metro durante los próximos años. Y no lo dice cualquiera, son pronósticos la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA), que durante años ha estado elaborando un mapa/simulador a nivel mundial para detallar el aumento del nivel del mar.

Uno de los impactos más evidentes de la subida del nivel del mar en Almería es el aumento del riesgo de inundaciones costeras. Las áreas bajas y municipios cercanos al mar estarían particularmente en peligro. Los eventos de marea alta y tormentas podrían provocar inundaciones más frecuentes y graves, lo que afectaría tanto a las zonas urbanas como a las áreas agrícolas cercanas a la costa.

Primeras zonas en inundarse: Deltas y desembocaduras de ríos

Los deltas y las áreas cercanas a las desembocaduras de los ríos son propensos a las inundaciones debido a su ubicación baja y su proximidad al mar. Por lo tanto, se inundarán primero. En la provincia de Almería, los deltas del río Almanzora y del río Adra son zonas que podrían estar en mayor riesgo. A medida que el nivel del mar se eleva, las aguas pueden inundar estas áreas, causando daños a la agricultura, la flora y la fauna locales, así como a la infraestructura cercana.

El delta del río Almanzora es una zona costera baja que podría ser especialmente vulnerable a la subida del nivel del mar. Si el nivel del mar aumenta, las aguas marinas podrían penetrar en el delta y afectar las áreas agrícolas y las comunidades cercanas. Esto podría tener un impacto negativo en la economía local y la biodiversidad.

Del mismo modo, la desembocadura del río Adra también representa un riesgo de inundación debido a su ubicación cercana al mar. Las crecidas del río combinadas con el aumento del nivel del mar podrían provocar inundaciones en las áreas adyacentes, amenazando la infraestructura y las actividades humanas en la zona.

Los estuarios, donde los ríos se encuentran con el mar, también pueden ser propensos a inundaciones a medida que el nivel del mar se eleva. El río Andarax, con su desembocadura cerca de la ciudad de Almería, es un ejemplo de una zona que podría enfrentar un mayor riesgo de inundaciones. El aumento del nivel del mar puede hacer que las aguas marinas retrocedan por el río durante las mareas altas, inundando las áreas cercanas y causando daños a la infraestructura y las comunidades costeras.

Punta Entinas-Sabinar sería la primera gran pérdida natural en caer bajo el mar en la provincia de Almería. Le acompañarían las playas de Cabo de Gata en su recta de Las Salinas, con apenas siete metros sobre el nivel del mar.

Los municipios en caer primero bajo el mar

Las áreas costeras bajas de Almería, incluidos municipios como Almería, Roquetas de Mar, Adra, Mojácar, Vera y Carboneras, son particularmente vulnerables a las inundaciones debido a su poca elevación sobre el nivel del mar. La subida del nivel del mar aumenta el riesgo de que las olas y las mareas altas penetren tierra adentro, provocando inundaciones más frecuentes y severas. Esto puede tener consecuencias devastadoras para las áreas urbanas, la agricultura y la infraestructura costera.

El primer municipio en caer bajo el mar será Carboneras, con apenas 10 metros de altura sobre el nivel del mar. La playa de Los Muertos, famosa por su belleza escénica, corre el riesgo de ser la primera zona por la subida del nivel del mar. La combinación de su ubicación costera y una topografía baja aumenta su vulnerabilidad a las inundaciones, lo que podría tener un impacto significativo en el turismo y la economía local. Aunque buena parte del municipio también se vería afectado.

Roquetas de Mar, con zonas también con apenas 10 metros sobre el nivel del mar, sería el siguiente destino de la subida. Las primeras zonas afectadas serían la Playa de la Bajadilla, el puerto deportivo y Punta Entinas-Sabinar.

Adra sería la siguiente. Y dentro del municipio, la playa de La Caracola, conocida por su belleza natural y su atractivo turístico, corre el riesgo de sufrir inundaciones. Sus características geográficas, con una topografía baja y una ubicación cercana al mar, la convierten en un área propensa a la intrusión del agua del mar a medida que el nivel del mar sube.

Garrucha, Mojácar y Vera tampoco se libran, en especial la primera de estas. La desembocadura del Río Aguas quedaría completamente anegada, así como el Puerto de Garrucha al completo, pero la peor parte se la lleva la localidad de Vera, pues Puerto Rey desaparecía casi por completo en varios puntos. Y no menos duro sería el panorama para Villaricos, la playa de Quitapellejos o la Fábrica del Duro.

Y, después, turno de Almería capital. Las zonas de esta que se inundarían dependen de varios factores como la topografía local, la infraestructura de protección costera y la velocidad de la subida del nivel del mar.

Parte del barrio de Pescadería sería una de las primeras zonas. Se encuentra en una zona baja y cercana al puerto de Almería. Dado su nivel de elevación y proximidad al mar, es posible que experimente inundaciones si el nivel del mar aumenta significativamente.

Consecuentemente, el Puerto le seguiría. Es posible que se vea afectado por la subida del nivel del mar. Los puertos a menudo tienen medidas de protección y adaptación en su infraestructura, pero pueden requerir actualizaciones para hacer frente a los futuros aumentos del nivel del mar.

A Agua Amarga tampoco le espera un futuro demasiado optimista teniendo en cuenta el informe elaborado por la NASA. La zona del búnker, las Cuevas sufrirían daños, pero, sobre todo, la playa.

Cabo de Gata

La Playa de las Almadrabillas es vulnerable a los impactos de la subida del nivel del mar. Sería, casi con toda aseguridad, la primera en inundarse.

La Playa de los Genoveses, con su belleza inigualable y su importancia ecológica, se encuentra entre las zonas que podrían verse afectadas por la subida del nivel del mar. Esta playa, que atrae a visitantes de todo el mundo con su arena dorada y aguas cristalinas, se caracteriza por una topografía baja y una ubicación cercana al mar. Como resultado, enfrenta un mayor riesgo de inundación a medida que el nivel del mar se eleva.

Otra zona icónica de Cabo de Gata en peligro es la Playa de Mónsul. Con su imponente formación de dunas, sus aguas turquesas y su famoso peñón, es una de las imágenes más reconocibles de la costa almeriense. Sin embargo, su ubicación costera y su altitud relativamente baja la hacen susceptible a la inundación y la erosión costera a medida que el nivel del mar continúa ascendiendo.