El cabecilla estuvo implicado en otra operación de gasóil adulterado hace un año

La operación cerrada durante los últimos días es continuación de las conocidas como Toleum I y II aunque estas tenían como modo de actuación el hacer pasar gasóleo agrícola (teñido con sustancias específicas para diferenciarlo del destinado a los turismos y camiones) con sustancias químicas que eran eliminadas para hacerlo pasar por ordinario. En aquella ocasión, Emilio T. M. fue detenido por integrar una organización de fraude en la que estaban implicadas 23 personas.

Por entonces -marzo de 2009- se intervinieron 25 inmuebles, 4 fondos de inversión, 18 camiones, 21 vehículos, 3 motocicletas y 3 remolques, valorados en 4 millones de euros. El total del fraude alcanzó los 6,7 millones de euros y se estimó que la cantidad de gasóleo ascendía a los 4,5 millones de litros que fueron mezclados con 13 millones de litros de aceites y otros hidrocarburos de origen sintético para aumentar de manera notable el volumen total de producto vendido, estos últimos sin los impuestos que rigen para los hidrocarburos convencionales y que eran sustraídos de la investigación de Hacienda.

Las detenciones se desarrollaron en Madrid, Toledo, Ciudad Real, Zaragoza, Huesca, Córdoba y Málaga, aunque era Almería el centro de manipulación del combustible y de distribución a otros lugares. La organización tenía como clientes a organizaciones de transportistas y a estaciones de servicio no franquiciadas por ninguna compañía petrolífera importante de bandera.