Así es Ángel Chacón, el joven almeriense que ha hecho historia en 'Saber y ganar'

Nadie había logrado antes lo que ha conseguido el almeriense Ángel Chacón. Se ha convertido en el concursante más joven en llegar a los 100 programas en Saber y ganar, el mítico concurso de La2 que presenta Jordi Hurtado. En apenas seis meses su vida ha cambiado radicalmente, pasando de ser una persona anónima a ser reconocido por la calle, sobre todo en Cuevas del Almanzora, su pueblo, donde incluso ha sido pregonero de las fiestas.

El 12 de septiembre de 2024 es una de esas fechas que nunca se le olvidarán. Ese día, Ángel Chacón aparecía en las pantallas de cientos de miles de personas. Se emitía el primero de los programas de Saber y ganar en los que concursaba este cuevano de solo 27 años. Lo que no sabía entonces es que iba a lograr entrar en el olimpo de los mejores concursantes, ese al que solo 21 personas han conseguido llegar en los 28 años de existencia del programa: convertirse en centenario.

Ángel Salvador Chacón Maldonado (Cuevas del Almanzora, 1997) es graduado en Derecho y trabaja como registrador de la propiedad en el municipio de Cunit, en Tarragona, tras aprobar la oposición en junio de 2023 quedando el 5º de su promoción. Desde que era un adolescente tenía claro lo que quería ser y tras muchos años de esfuerzo lo ha conseguido. "Desde que tengo 13 o 14 años tenía claro que quería hacer esa oposición; mi tía Isabel es registradora de la propiedad y es una persona que admiro mucho", admite Ángel. Comenzó estudiando en el colegio Encarnación Asensio Granados y luego pasó al IES El Jaroso. Después se fue a Murcia, donde estudió el grado de Derecho, y en 2019 comenzó a preparar la oposición para el Registro de la Propiedad en una academia de la ciudad murciana.

A lo largo de sus cien programas en Saber y ganar, Ángel ha demostrado tener unos vastos conocimientos en multitud de materias. "En verano, tras haber grabado ya los primeros programas, hablé con antiguos profesores del instituto y les pedí apuntes y libros de Historia, Historia del Arte, Biología...", confiesa. Pero para sobrevivir en el concurso no solo basta con eso, sino que hay que ser una persona muy curiosa y estar atento a la actualidad: "Cuando ya llevas un tiempo allí te das cuenta que hay algunos temas que son más recurrentes y hay que fijarse en las novedades de premios literarios, actores o actrices que hayan fallecido recientemente, etcétera", explica. "Es ir curioseando un poco, como he hecho toda mi vida", sentencia.

Ángel, además de un estudiante sobresaliente, es un joven con bastantes inquietudes culturales. Le gusta leer novelas de Vázquez Montalbán y Vargas Llosa; el cine de Wes Anderson y Quentin Tarantino; o escuchar la música del ubetense Joaquín Sabina o Extremoduro. También es una persona comprometida con diferentes causas sociales, como se ha podido ver en las camisetas de varias asociaciones que ha vestido en el programa. Sin ir más lejos, en su primera aparición llevaba una camiseta de la asociación Salvemos el Salar de los Canos y su entorno, una plataforma que trabaja por la conservación de un importante humedal de Vera.

¿Cómo fue la experiencia en Saber y ganar?

Ángel Chacón se aficionó a Saber y ganar cuando estudiaba la carrera. "Desde 2016 a 2019 lo veía casi a diario", admite. Jugando desde casa, como hacen tantos otros espectadores, comprobó que no se le daba nada mal, así que le picó el gusanillo: "¿Qué pasaría si voy?", se dijo. Así que en 2024, aprovechando que estaba viviendo en Barcelona, muy cerca de donde se graba el programa, decidió probar suerte. Antes, en 2017, con solo 20 años, había participado en un casting de Pasapalabra en el que buscaban a los mejores de cada comunidad autónoma, pero no lo cogieron.

Desde el primer programa se vio que Ángel Chacón podría hacer algo grande en el concurso. Ese día logró ser el ganador sumando 480 puntos. Tras ese hubo otros 99 programas más. Ya en el decimotercero consiguió convertirse en "magnífico", es decir, aquellos que alcanzan los 7.000 puntos. Luego, siguió avanzando con paso firme, demostrando una enorme habilidad para el cálculo mental y unos amplios conocimientos en general.

"En un primer momento fui a ver lo que duraba. Ya cuando llevaba cuatro o cinco programas y vi que se me estaba dando bien, pues sí que pensé que podía llegar a magnífico, pero en ningún momento te planteas que puedes llegar a los 100, porque sabes perfectamente que un programa malo te vas al hoyo", cuenta el cuevano.

Una de las curiosidades de su paso por el programa es cómo afrontó la prueba de "La parte por el todo", esa en la que deben descifrar un todo a partir de unas complejas pistas diarias. Para ello, Ángel contó con un equipo de expertos que lo asesoraban. ¿Eran de su grupo de amigos? ¿Del trabajo? No, su consejo de sabios, por llamarlo de alguna manera, eran antiguos concursantes que "se ofrecieron altruistamente a echarme una mano". Es algo habitual, según cuenta. "Creo que al final éramos ocho o nueve. Desde el programa lo saben y es una cosa que más o menos es habitual, pero es cierto que es un poco injusto el hecho de que yo tuviera a gente de mucha solera en el programa que me estaban echando una mano, con respecto a otros concursantes que no los tenían", dice mostrando una enorme sinceridad.

Pero sin duda, donde más ha destacado Chacón es en la prueba de la calculadora, una muy temida por muchos concursantes pero que para él ha sido como coser y cantar. Tanto es así que le han apodado "El chico calculadora". "Creo que hay una parte que es bastante innata, porque a mi hermano Miguel también se le da genial el cálculo mental, y a mi hermana y a mi padre", explica, aunque también es algo que practica a diario: "En mi cabeza hago operaciones continuamente con los números que me voy encontrando; es algo que me gusta".

Volverá a Saber y ganar en 2026 y se plantea otros concursos

El pasado viernes 7 de marzo, Ángel Chacón se despidió de Saber y ganar con un programa especial por lograr llegar al 100. Un honor reservado para aquellos que consiguen esa hazaña. Ahora, de vuelta a la rutina, confiesa que le apetece descansar, aunque no descarta participar en el futuro en algún otro concurso: "Hay algún programa por ahí que me llama más la atención que otro a la hora de participar, pero no es algo que de momento piense". Y aunque todo el mundo crea que podría destacar en Cifras y letras —y admite que ese es uno de los concursos que le gustan—, él no lo tiene tan claro: "La mecánica que tiene Cifras y Letras no es puramente de hacer operaciones matemáticas, sino que se basa en intentar aproximarse a los números que vayan saliendo. Cuando estoy viéndolo desde el sofá, tampoco es que se me dé tan bien. Y luego, la parte de las letras, creo que depende un poco de la inspiración que tenga ese día".

Donde sí que concursará seguro es en los programas especiales de los Magníficos que se emitirán en febrero de 2026 con motivo del vigesimonoveno aniversario de Saber y ganar. Allí competirá con todos los que este año alcancen los 7.000 puntos y durante varios días pugnarán por ser el mejor concursante de 2025, el Supermagnífico. "Son programas que tienen un componente de aleatoriedad grande, y una dificultad también enorme porque te enfrentas a rivales muy buenos", explica. Por eso, cuenta que irá sin pretensiones, "solo a pasarlo bien y ya está; si lo ganase, pues mejor que mejor, pero si no, tampoco creo que le pueda poner ningún pero a mi participación". Si ganase podría volver de nuevo a los programas diarios y, quién sabe, quizás llegar a convertirse en bicentenario. Porque para este joven almeriense todo parece posible.