La plaza Masnou, con contenedores soterrados y sin restos arqueológicos

Es una de las plazas de mayor tránsito peatonal del casco histórico de la capital, especialmente por jóvenes en los fines de semana, que ya ofrece un aspecto aseado y, de igual manera, rejuvenecido. El Ayuntamiento de Almería ha concluido la remodelación de la plaza Masnou, ejecutando dos proyectos, el de la reforma en sí, guiado por la Concejalía de Servicios Municipales, y el correspondiente a la instalación de contenedores soterrados, por parte del área de Sostenibilidad, que en noviembre se topaba con la aparición de restos arqueológicos.

La remodelación de la plaza Masnou, incluida en el Plan Municipal de Plazas, tiene por objetivo conseguir un “espacio más amable, seguro y accesible, mediante una reordenación urbanística y mejora estética”, tal y como describía al inicio de esta actuación la concejal Sacramento Sánchez.

Según el proyecto, los materiales elegidos en este nuevo diseño están acordes “con la identidad de La Almedina”, empleando pavimentos realizados con ladrillo visto macizo ‘tipo mudéjar’ y pavimento tipo ‘granadino’ que, delimitados con piezas de mármol, ofrecerán geometría arabesca, habiendo incluido el Consistorio, entre el mobiliario urbano, aparcamientos destinados a bicicletas, así como parterres delimitados con plantas como elementos verdes completados con nuevo arbolado.

Las obras, que fueron paralizadas a finales de noviembre, dejaron al descubierto restos arqueológicos que fueron estudiados e informados a la Delegación Territorial de Cultura de la Junta de Andalucía como administración sobre la que recae la responsabilidad patrimonial. Eran muros de delimitación y tabicación interior de viviendas correspondientes al desarrollo urbano de época musulmana, pero se encontraban fragmentados y muy deteriorados por lo su conservación quedó desestimada.

La empresa contratada por Sostenibilidad Ambiental, Facto, pudo proseguir con las obras de contenerización que han permitido dotar a la plaza Masnou de cinco contenedores soterrados. Esta isla ecológica dispone de dos contenedores de residuos sólidos, uno para envases, otro para cartón y el último para el reciclaje de vidrio.