Expediente del Defensor del Pueblo por los ‘asaltos’ al yacimiento de Almanzor, junto a la Alcazaba de Almería

Al lado del conjunto monumental de la Alcazaba se encuentran los restos arqueológicos hallados en la calle Almanzor. Aunque están acotados mediante un vallado perimetral, los ‘asaltos’ a este yacimiento, bien por intrusos en un área donde no está permitido el acceso a personas, bien por el vertido de residuos, han provocado que el Defensor del Pueblo Andaluz abra un expediente en el que manifiesta la preocupación de la Oficina por la correcta conservación de la excavación con datos representativos de la trayectoria vital de la ciudad y restos de viviendas de la época medieval.

El Defensor del Pueblo explica en el expediente haber tenido conocimiento de este yacimiento en la falda de La Alcazaba con restos de viviendas datadas en torno al siglo XII. “Se indica que habrían realizado unas primeras investigaciones que fueron suspendidas hasta el reinicio de los trabajos en una segunda fase pero, según la información, el recinto estaría siendo lugar de acumulación de basuras y restos además de que el cerramiento se encuentra violentado y con una falta de seguridad. La situación, de confirmarse –añade–, pondría en peligro los restos hallados y que quedan aún pendientes de evaluación y estudio, así como de los proyectos de conservación o restauración que se definan”.

Los restos acotados, en efecto, corresponden a la primera fase de estudios arqueológicos contratados por el Ayuntamiento de Almería dentro de los planes de mejora del entorno de la Alcazaba, que llevó a Urbanismo al derribo de viviendas de la calle Almanzor para mejorar este acceso al conjunto monumental.

Hay en cartera una segunda fase para completar la investigación iniciada en esta área tan sensible desde el punto de vista arqueológico. Según ha informado el Ayuntamiento, los pliegos de condiciones están confeccionados y en Intervención para su fiscalización, por lo que en las próximas semanas la licitación de esta segunda fase puede quedar aprobada por la Gerencia de Urbanismo.

Pero entre una fase y otra, lo cierto es, pese al vallado perimetral, el incivismo ha acarreado la presencia de residuos entre los restos arqueológicos y la intrusión en una zona que debiera ser respetada. El pasado mes, la puerta de acceso aparecía forzada.

Ha sido ya reparada, con nuevo candado incluido, y el Ayuntamiento asegura que se realizan limpiezas periódicas, por lo que apela a la concienciación ciudadana hasta que los arqueólogos puedan retomar su investigación. Las últimas lluvias han enverdecido el entorno de la Alcazaba.

El Defensor se ha dirigido tanto al Ayuntamiento de la capital como a la Delegación Territorial en Almería de la Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico, incoando una queja de oficio e interesado en conocer “las medidas que se han adoptado por la autoridad cultural en orden a la delimitación y protección de este yacimiento, así como los elementos de protección y defensa ante el riesgo de estos supuestos actos que violentan los restos susceptibles de tutela y defensa”.

“A la luz de los acontecimientos, resulta de especial interés conocer las medidas de protección establecidas y, asimismo, la capacidad de respuesta y reacción de la autoridades culturales para impedir supuestos de expolio, así como falta de protección para dichos hallazgos”, remacha.