San Indalecio y la Virgen del Mar vuelven rejuvenecidos a la Casa Consistorial

La apertura al público de la Casa Consistorial, cerrada allá en 2005, está cada vez más cerca, con unas obras –la adaptación de su interior– que han sobrepasado ya el ecuador de su ejecución y que están deparando gratas sorpresas. La última ha sido la recuperación de las imágenes de los patrones de Almería, San Indalecio y la Virgen del Mar, cuya restauración ha podido comprobar la consejera de Fomento, Marifrán Carazo, y la alcaldesa de la ciudad, María Vázquez, en una nueva visita a estas obras que acabarán antes de verano.

El recorrido por la Casa Consistorial ha tenido dos momentos claves en su inicio y término. Acompañadas por la delegada del Gobierno de la Junta en Almería, Aránzazu Martín, la directora general de Vivienda y Regeneración Urbana, Eloísa Cabrera; y la delegada de Fomento, Carmen Belén López, la comitiva ha comenzado ascendiendo la escultural escalera que está siendo construida para acabar observando al detalle los bajorrelieves. “Estas obras combinan la modernidad con la restauración”, significaba Vázquez con respecto a sendos elementos en esta parada que ha ofrecido una imagen bien distinta de los santos.

Se encontraban en la casa principal, nada más subir la escalera de mármol, y daban la impresión de ser esculpidos sobre de piedra o figuras de escayola. Lo cierto es que ni lo uno ni lo otro. Son de madera, que una laboriosa restauración ha conseguido devolver en su policromía y en su volumen original con todo lujo de detalles de las líneas talladas, por ejemplo, de los mantos.

Se desconoce la fecha exacta, si bien posiblemente estos bajorrelieves procedan de la posguerra. En los años sucesivos han soportado capas y capas de pintura y cal que le daban ese aspecto de pared. De hecho, según ha explicado la restauradora, tanta capa había desdibujado a las imágenes hasta el punto de engañar el ojo de una largura de pelo que no es tal.

La consejera y la alcaldesa, que también estuvieron acompañadas por la concejal de Urbanismo, Ana Martínez Labella, y la arquitecta Susana Ordaz, supervisaron la restauración del antiguo Vitor, las arcadas junto a la escalera de casa Central y los paños medianeros de ladrillo de Casa Prats.

En proceso de restauración se encuentran también el Sagrado Corazón de Jesús, que completaba el conjunto de santos, los muebles del antiguo Archivo Municipal, las arcadas de Casa Lledó y la lámpara y el aplique del Salón de Plenos, donde se están haciendo pruebas del artesonado que emula al original –en este caso, no era madera noble, sino escayola–, y que recupera el mismo suelo de mármol blanco, mientras que en otras zonas la Casa Consistorial se colocarán las losas hidráulicas, a modo de alfombra, que fueron cuidadosamente retiradas en su momento.