El Cable Inglés de Almería protagoniza los viajes de National Geographic por el mundo

Almería

La prestigiosa revista invita a recorrer el paseo peatonal abierto al público el pasado mes de abril

El Cable Inglés de Almería
El Cable Inglés de Almería

La reputada publicación National Geographic se ha paseado en su edición de agosto sobre el Cargadero del Mineral de El Alquife de Almería, conocido popularmente como Cable Inglés, en un reportaje que invita a viajar a la capital almeriense y conocer este Bien de Interés Cultural a sus miles de lectores repartidos por todo el mundo, después, además, de haber dedicado otra de sus páginas a la belleza de la playa de Los Muertos.

El patrimonio natural e inmueble que atesora la provincia de Almería se está dando a conocer a través de estas publicaciones especializadas, en los que se muestran los atractivos considerados como desconocidos. En su publicación del pasado 23 de agosto, la periodista Meritxell Batlle , redactora de Viajes para National Geographic, recorre la historia de este “balcón al Mediterráneo” que resalta como “icono del patrimonio industrial español”, tras la apertura del paseo peatonal de casi un kilómetro como colofón de la conclusión de la segunda fase de obras de rehabilitación de este declarado BIC.

Además, la publicación ha multiplicado lectores en beneficio del turismo en Almería, ya que ha sido difundida a través de la plataforma de noticias Google Discover.

Inaugurado el pasado mes de abril, los 900 metros de este paseo elevado, que arranca en el parque de la Estación, han sido recorridos ya por miles de almerienses y visitantes, ofreciendo unas perfectas panorámicas como fondo fotográfico, si bien aún le falta contenido informativo sobre la historia del Cable Inglés de la que National Geographic se hace eco.

Relata cómo la compañía The Alquife Mines & Railway Company Limited, la empresa británica que explotaba los yacimientos de hierro de Alquife (Guadix), contrató al ingeniero escocés John Ernest Harrison para que diseñara un cargadero similar al que realizó en Gran Bretaña para cargar el carbón de las minas, dando comienzo la obra entre los años 1902 y 1904.

“Harrison replicó este modelo de descarga por gravedad en Almería, donde añadió una novedad: unos grandes depósitos o tolvas laterales, ofreciendo a la instalación un doble uso como almacén-contenedor y muelle de descarga. Para ello, necesitó 3,8 toneladas de acero, 8.000 metros cuadrados de madera, hormigón y más de un kilómetro de vía férrea. En total, erigió una estructura de 100 metros de largo y 17 de alto”, recuerda la publicación, donde se destaca la importancia de esta obra de la arquitectura del hierro.

stats