Bandera Negra de Ecologistas en Acción para la playa de Costacabana

De canciones no solo se alimentan los clásicos del verano y junto a las banderas azules se han convertido en una tradición a lamentar las que concede, cada temporada, Ecologistas en Acción. Son las banderas negras que de forma simbólica ondean esta temporada estival en 48 playas del litoral español. Y dos de ellas, en Almería. La del Algorrobico repite, otro año más, y entra en este listado vacío de orgullo la playa de Costacabana y el entorno de El Perdigal.

Los vecinos de Costabana reciben, en cierto modo, esta bandera negra como símbolo que refuerza las reclamaciones que, desde hace años, dirigen a las administraciones competentes para poner punto final a los vertidos de aguas residuales que llevan sufriendo prácticamente cuarenta años. “Ese simbolismo los vecinos lo trasladamos al Ayuntamiento de Almería”, comenta José Reche, vicepresidente de la Asociación de Vecinos Bahía de Costacabana. “Reclamamos al Ayuntamiento nuestra bandera azul y esa bandera negra no es para la playa de Costacabana, sino para el Consistorio y la empresa concesionaria del servicio de aguas, Aqualia, por su mala gestión”.

La representación vecinal tiene pendiente la celebración de una reunión para determinar la solución más adecuada entre las alternativas que el equipo de gobierno se comprometió a analizar antes de la elecciones municipales. Bahía de Costacabana espera mantener una entrevista con la nueva responsable del área de Servicios Municipales “para poder cambiar esta bandera negra por la azul entre todos”, afirma, en tono conciliador, Reche.

El informe Banderas Negras 2019 que cada año edita Ecologistas en Acción recoge la playa de Costracabana como “uno de los mayores quebraderos de cabeza de la Administración Central y para los usuarios de este espacio costero”. Resume los millones invertidos por Costas desde 2005 en labores de regeneración de la playa con aportes de arena y construcción de espigones sin que los mismos terminen por ser efectivos a la hora de retener esta nueva arena, mientras que la zona protegida como parque litoral de El Perdigal continúa perdiéndola.

Pero también recapitula el grupo ecologista esa otra preocupación vecinal para la que creen necesaria la confluencia de las diferentes administraciones a la hora de acabar con los vertidos sólidos sin tratar desde los emisarios de la playa, especialmente los días de lluvias al no existir redes separativas. “En los últimos años, los vecinos están comprobando que el emisario de pluviales evacua con frecuencia aguas con residuos sólidos que no son depurados ni tratados, infringiendo la ley. Es necesaria una mayor implicación del Ayuntamiento en su conservación y también mayor concienciación de los usuarios, lo que ayudará a mejorar la situación de esta playa y parque”.