Avenida Vilches abre las puertas de su nuevo parking público

Con seis meses de retraso abre sus puertas al público el parking de la remodelada Avenida Vilches. Este nuevo aparcamieto construido por la empresa adjudicataria UTE Salcoa- Facto, cuenta con tres accesos peatonales, tres ascensores, una entrada y una salida para vehículos.

En torno a las 11:00 horas de ayer desaparecieron las vallas que cortaban una avenida que ha estado casi un año y medio de obras. Las reformas de la vía junto con la construcción del parking permitirán que se pueda contemplar sin barreras visuales la fachada rehabilitada de la Plaza de Toros desde Calle Granada, que ahora cuenta con un espacio más abierto tanto para peatones.

Tal vez el desconocimiento de la ciudadanía acerca de esta nueva apertura o, tan solo la casualidad, hizo que las primeras horas del parking se desarrollaran con excesiva tranquilidad, pues tuvieron que transcurrir al menos 2 horas para que el primer vehículo hiciera uso de las nuevas intalaciones.

La anécdota de la mañana estuvo precisamente con la llegada del primer coche que se dispuso a estacionar su coche. Este fue el de una familia procedente de Pontevedra que se encuentra disfrutando de sus vacaciones en la capital, quienes hicieron uso del parking con cierto recelo al "ver el poco movimiento que hemos visto para ser una zona que está cerca del centro y más a estas horas", aseguraron sorprendidos.

El nuevo aparcamiento subterráneo es de forma rectangular y dispone de un total de 379 plazas, de las cuales13 están destinadas para el estacionamiento de motocicletas. Hay un total de 3 plantas con una superficie de 4.088,99 metros cuadrados cada una. La primera planta, que cuenta con 104 plazas, va a estar destinada por completo a la rotación. En lo que respecta a la venta de plazas para residentes, en la planta sótano -3, están vendidas el 100% de las plazas y en la planta sótano -2, la venta roza ya el 50%.

Los habitantes de la zona, por lo general, están satisfechos con la finalización de las obras y la apertura de la calle: "los vecinos están contentos en el sentido de que la zona ha quedado muy bien, pero el problema ahora está en que hay menos aparcamientos públicos y estos nuevos son de pago. No todo el mundo se puede permitir costearse una plaza", cuenta Francisco Sánchez, un vecino que lleva toda su vida viviendo en Avenida Vilches.

En relación a los aparcamientos de pago, vecinos como Raúl Rodríguez consideran que "sí que es verdad que las obras le han dado vida al barrio pero también es verdad que, con el parking, se dificulta el estacionamiento a todos los que vivimos aquí porque han desaparecido todas las plazas de aparcamiento públicas".

Ahora los habitantes de la zona esperan que con las nuevas mejoras tanto de la avenida como la contrucción del parking, "la gente sea responsable, no dañe el nuevo mobiliario y a ver si con los aparcamientos, los coches no molestan más con sus aparcamientos encima de aceras y demás", explica Francisco Sánchez.