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El Ayuntamiento de Almería emprende una nueva campaña de control sobre la sobrepoblación de palomas que registra la capital, así como la proliferación de cotorras y gaviotas, mediante la confección, primero, de un censo y la captura de las aves en las zonas donde se estime necesario –incluidos edificios privados– al tratarse de especies invasoras y que pueden transmitir enfermedades zoonóticas.
La buena climatología, un entorno favorable y la disponibilidad de recursos alimenticios ilimitados han favorecido el crecimiento del número de palomas y cotorras, sobre todo argentinas, hasta el punto de que estas aves, entrañables años atrás, pueden acabar convirtiéndose en un problema de consideración. No solo por los corrosivos excrementos y molestos ruidos, sino porque constituyen una amenaza para las especies autóctonas, además de ser transmisoras de enfermedades y provocar daños en tendidos eléctricos, e incluso accidentes por la caída de nidos.
Desde hace años, la capital no llevaba a cabo capturas, en concreto, de palomas, por lo que el Consistorio ha dado su conforme en Junta de Gobierno a la propuesta del área de Sostenibilidad Ambiental de contratar a una empresa especializada. Los servicios para el control de la población de fauna silvestre e invasora en Almería ha sido adjudicados a la empresa Andaluza de Tratamientos de Higiene, que actuará durante un periodo de dos años y recibirá por el desempeño de su trabajo un total de 96.674,16 euros para el que también el Ayuntamiento cuenta con la colaboración de la Universidad.
La portavoz del equipo de Gobierno, María Vázquez, ha desgranado en rueda de prensa que el objetivo de este contrato es el de “velar por la salud pública y el bienestar de los ciudadanos mediante el control de la población de diferentes especies de aves tales como las pertenecientes a las familias Columba, Charadriiformes, Psittacidae, artidactilos, reptiles..., mediante capturas selectivas”. Después se procederá a su suelta en espacios ecológicamente adecuados.
El contrato adjudicado incluye la difusión de información y una campaña de concienciación a la ciudadanía al objeto de evitar en la medida de lo posible dar de comer a estos animales a favor de las especies autóctonas y del mantenimiento de las condiciones higiénico sanitarias adecuadas de los edificios públicos y privados, “en no pocos casos afectados por la presencia de palomas”. También se llevará a cabo un chequeo estado sanitario de las aves.
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