Almería concluye los trámites para licitar las obras del cine Katiuska

El Ayuntamiento de Almería ha concluido los trámites administrativos previos que permitirán en las próximas semanas sacar a licitación las obras para la rehabilitación del antiguo cine Katiuska, donde a través de una inversión de más de 1,4 millones de euros se prevé crear un nuevo centro audiovisual y de uso cultural-expositivo en el casco histórico de la ciudad.

Fuentes municipales han indicado a Europa Press que la actuación ya cuenta con informe favorable respecto a la retención de crédito necesaria para licitar la obra a través del Área de Servicios Municipales, de modo que el asunto podría someterse al dictamen de la junta de gobierno local durante este mes o a principios de septiembre, conforme a las primeras estimaciones.

El proyecto contempla la recuperación del aspecto exterior original del inmueble, que se convertirá en una sala diáfana de dos alturas con varios elementos singulares, entre ellos una escalera "a modo de escultura" y un ascensor envuelto en un elemento cilíndrico que llevará la luz interior hasta una cubierta de cristal a modo de faro.

La actuación se enmarca en el proyecto Camina (Community Awakening for Multicultural Integrative Narrative of Almería), que contempla una dotación global de 5,4 millones de euros --financiados con fondos europeos en un 80 por ciento-- y que incluye además como nodos culturales el Mesón Gitano y el Museo Doña Pakyta. Una vez se adjudiquen los trabajos, se prevé que se desarrollen en un espacio de nueve meses.

En este sentido, el Consistorio trabaja paralelamente con los socios del proyecto que, a través de 16 colectivos y asociaciones, van a desarrollar los laboratorios de creación cultural con los que se pondrán en marcha iniciativas de distinta índole para promover la integración socio-cultural a través de la cultura y la revalorización intercultural e histórica de la ciudad.

La concejal de Presidencia, Planificación y Proyectos Europeos, Ana Martínez Labella, ha mantenido este miércoles una reunión con los colaboradores del proyecto, entre los que se encuentra la Diputación Provincial y la Junta de Andalucía, la Fundación Arte Ibáñez Cosentino a través del Museo Doña Pakyta, Kuver Producciones, la Escuela Municipal de Música y Artes (EMMA), Eptisa, Khora Urban Thinkers y Universidad de Almería para proponer una ampliación del programa cultural hasta el mes de diciembre.

La posibilidad de ampliar el calendario de actividades, que podría iniciarse durante el mes de septiembre, será también trasladada a los 16 laboratorios que ya trabajan en sus propuestas culturales que, conforme al proyecto, se catalizará a través de los nodos establecidos en el Museo Doña Pakyta, el Mesón Gitano y el propio Cine Katiuska aunque su desarrollo contempla otros espacios emblemáticos, como la Alcazaba de Almería o el CAF.

Con una subvención total de 234.000 euros, los laboratorios culturales conformarán seis grupos de trabajo en torno a disciplinas como artes audiovisuales, artes escénicas y literarias, bellas artes y artes plásticas. Así, trabajan ya en diseñar, producir y ejecutar una programación cultural alineada con la narrativa cultural de Camina para el último trimestre del año.

Como adelanto del plan, el Museo Doña Pakyta acoge desde principio de año las exposiciones temporales 'La Chanca en el Imaginario I' y 'De Goya a Antonio López', una de ellas ubicada en el nuevo espacio expositivo adaptado en el sótano del centro artístico dentro del proyecto 'Camina'.

UN ESPACIO "MODERNO, VERSÁTIL Y FUNCIONAL"

El proyecto de rehabilitación del Cine Katiuska diseñado por el arquitecto Francisco García Ruiz pretende potenciar la imagen original del inmueble, creado por Trinidad Cuartara y que data de 1904, mientras que por dentro buscar ser "moderno, versátil y funcional que pueda acoger en su interior todo tipo de actividades culturales".

Para ello, se eliminarán elementos superfluos ligados a otros usos, ya que además de cine, el edificio también ha sido almacén de uva, centro de manipulado de esparto y almacén de hierro hasta mediados de los años 60.

El edificio de 604,86 metros cuadrados mantendrá su entrada principal en la planta baja a través de la calle General Luque y, gracias a su desnivel, abrirá una segunda entrada desde la calle Hernández. Ambas alturas quedarán comunicadas con una escalera central y un ascensor, sin que la cubierta sea transitable.

La luz es uno de los elementos protagonistas de este diseño en el que se han introducido lucernarios con los que potenciar el concepto diáfano del inmueble, para lo que también se cuenta con un patio que funciona como un "telón de fondo" para el edificio, que estará dotado con tabiques móviles en su parte superior para la distribución del espacio conforme a las necesidades de cada momento.

El resultado será una sala "versátil" para actividades culturales "de pequeño formato" principalmente para las actividades de las asociaciones del barrio, desde carnavaleros, asociaciones musicales, actividad cultural o flamenco, entre otras.