Este es el municipio almeriense en el que se vive San Fermín igual que en Pamplona

San Fermín es una de las fiestas más populares de toda España. Entre encierros, pañuelos rojos y mucha diversión, no son pocos los turistas que llegan a la capital Navarra para disfrutar de estos días de celebración.

El municipio de Carboneras, ubicado en el Levante Almeriense, celebra cada año esta festividad a su manera. Para dar inicio a estas fiestas, los vecinos de la localidad se han reunido en el Ayuntamiento de Carboneras este 6 de julio, donde el alcalde, Salvador Hernández, ha llevado la voz cantante durante este peculiar chupinazo.

Desde hace ya diez años, Carboneras celebra este acto para conmemorar el hermanamiento entre la localidad costera y Pamplona. A él ha asistido un numeroso grupo de pamploneses residentes en el municipio, con sus pañuelos rojos atados al cuello, como marca la tradición. Estos vecinos de origen Navarro han podido sentirse más cerca de casa que nunca, gracias a esta iniciativa que comenzó en el año 2014.

Para conocer el origen de esta fiesta, hay que remontarse hasta el año 1186, año en el que el obispo de la ciudad, Pedro de París, recogió en la ciudad francesa de Amiens las reliquias de San Fermín. Sin embargo, ya en 1591, las fiestas se trasladaron hasta el día 7 de julio por motivos comerciales, y para además, poder festejar en la calle con un tiempo más apropiado.

El encierro, tal y como se conoce a día de hoy, se creó debido a la necesidad de trasladar a los toros desde las afueras de la ciudad hasta la plaza de toros. En el trayecto en el que los pastores guiaban a los animales, llegaban a la carrera hasta la plaza en la que posteriormente serían toreados. Muchos lugareños se sumaban a este camino con varas y palos, lo que finalmente derivó en la fiesta hoy conocida. El éxito, que ha mantenido esta tradición viva hasta la actualidad, se debe, según historiadores, a la atracción que supone el riesgo de correr delante de estos animales.

Los encierros empiezan el 7 de julio y se prolongan hasta el día 14. Consisten en una carrera de 849 metros delante de seis toros de lidia, que termina en la plaza de toros de la ciudad. Estos comienzan a las 8 de la mañana y duran alrededor de tres minutos. La población de Pamplona es de unos 280.000 habitantes, pero durante esta fiesta llegan a reunirse más de un millón de personas en la capital navarra.