La Isleta del Moro, un paraíso de Cabo de Gata no solo para el verano

El Parque Natural de Cabo de Gata - Níjar ofrece un sinfín de lugares únicos, con playas de belleza virgen y paisajes que enamoran a propios y extraños. Rincones que merecen ser vividos y disfrutados todo el año, no únicamente en verano.

Uno de esos paraísos almerienses es la Isleta del Moro, perteneciente al término municipal de Níjar. Ubicado en la parte más levantina del Parque Natural, es uno de los lugares más visitados por su paisaje y su múltiple oferta de hostelería y ocio.

La Isleta del Moro dista poco más de 40 kilómetros del centro de Almería capital, o lo que es lo mismo, unos 50 minutos por carreteras provinciales. O por el Levante, unos 40 minutos desde Carboneras.

La primavera que comienza este domingo es, quizás, el mejor momento para disfrutar de este pequeño pueblo. Sin la masificación del verano, es mucho más fácil aparcar en la misma calle Virgen del Mar, a pie de playa. Tomar el sol, respirar la brisa marina e incluso darse el primer baño del año es un placer en la Playa del Peñón Blanco. Tiene unos 400 metros de longitud y está formada por arena fina. Recibe su nombre por una roca de color blanco que se sitúa en medio de la arena y que algunos bañistas aprovechan para resguardarse del sol, según destaca la cabogataalmeria.com.

Merece la pena también subir hasta la Punta de Loma Pelada, el peñón con acceso desde tierra. Desde ahí hay una bella panorámica de todo el pueblo, con su playa, las casitas blancas y, detrás, las barcas de los pescadores que usan este fondeadero natural.

Al otro peñón, la Isleta del Moro, se puede llegar nadando o, mejor aún, buceando. Hay varios centros de buceo en la zona que ofrece la posibilidad de sumergirse en estas aguas cristalinas llenas de vida.

Este pequeño pueblo blanco es ideal para los amantes de la fotografía, pues ofrece un paisaje único entre montañas, acantilados y el mar cristalino, con casitas bajas y los pescadores, echando sus cañas al mar, rodeados de barcas sobre la arena. Es imposible hacer una foto mala.

Su belleza tampoco pasa desapercibida para los cineastas. Tanto que aquí se rodaron algunas de las escenas de la serie Veneno, de Javier Calvo y Javier Ambrossi. La feria del puerto de Adra de la infancia de Cristiana Ortiz que se ven en la ficción son, en realidad, escenarios de La Isleta del Moro.

Pero la Isleta del Moro además ofrece una oferta hostelera amplia y de calidad. Por ejemplo, se puede tomar una cerveza (o un zumo) a escasos metros de la arena en la terraza de 'Sobre la marcha', un local de nueva construcción con unas vistas privilegiadas.

O si se quiere comer un buen arroz o el mejor pescado de la zona, una opción que nunca falla es el Restaurante La Ola. Con suerte puede conseguir una mesa en un mirador donde literalmente rompen las olas del Mediterráneo (y si no, en el interior también tiene preciosas vistas). Actualmente está en reformas, pero abrirá en semanas.

Otras buenas opciones son el Restaurante Isleta del Moro, la Pizzeria Isoletta o el Bar Calagrande.

Una visita a la Isleta del Moro en primavera no puede acabar sin pasarse por el Mirador de la Amatista. Está en la carretera en dirección a Rodalquilar, al pasar el camino que lleva a la Cala de los Toros. Este mirador de las alturas permite "divisar el abrumador poder de la naturaleza hipnotiza a cualquiera", según el Ayuntamiento de Níjar.

Y ya puestos, quedan muy cerca otros paraísos como Los Escullos, Rodalquilar y Las Negras.