El desgranijo de maíz, la tradición que Adra se niega a perder

El cultivo de maíz fue durante el Siglo XX una fuente fundamental de alimento para todos los vecinos abderitanos. Todos los años, con la llegada del otoño, llegaba el turno de extraer el grano. Esta técnica, el ‘desgranijo’, era un momento social en la vida de este pueblo milenario. En las casas se reunían las familias en los patios para hacer esta laboriosa tarea manual y hacer arte con las canciones típicas.

Antonio Gines, Hermano Mayor de San Marcos, ha organizado la ceremonia que este sábado honraba a las generaciones que hicieron de esta técnica fuente de alimento durante décadas. Se llevaba haciendo 27 años, pero la pandemia provocó su suspensión.

Es una forma de explicar la historia de este pueblo milenario. “Antes había mucho maíz para los animales, se molía mucha harina para comer, con eso hacías tus migas, tus gachas”, cuenta, con la resaca aún de lo vivido. Decenas de personas se sentaron en el suelo en un sábado noche para volver a desgranar el maíz como si de un ‘regreso al pasado’ se tratase. 

No quieren que el recuerdo se pierda. En ello tienen un papel fundamental los niños, que aprenden esta labor de mano de sus predecesores. “Las nuevas generaciones no lo han vivido pero estaban entusiasmados. Los niños se ponían a desgranar y los padres y abuelos se lo explicaban”, rememora.

Seguirán mientras haya maíz. Cada vez cuesta más encontrar este cultivo típico de la Vega de Adra. “Adra sigue siendo tierra agrícola pero se ha pasado al invernadero”, cuenta. Por si fuera poco, cada vez son menos las familias que crían animales en sus casas. “Hay muy poca gente que cría sus animales, tienes que estar dado de alta como ganadero y eso hace que haya menos. Hay mucha burocracia”, cuenta.

Para no perder la costumbre, se han ofrecido ya un puñado de productores a sembrar el maíz y poder recogerlo el otoño que viene. La fiesta para 2025 está asegurada. “Ya se han ofrecido voluntarios para el año que viene, han cogido maíz de este año para guardarlo como semilla para el año que viene”, defiende. Mientras haya quien siembre, habrá celebración anual del ‘desgranijo’ del maíz.